El PP se remite al plazo límite para concretar las enmiendas a la reforma laboral
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, aseguró hoy que su grupo parlamentario agotará el plazo acordado para presentar enmiendas a la reforma laboral, el 21 de julio, antes de desvelar sus propuestas en esta materia que incidirán, según adelantó, en la negociación colectiva y la formación profesional. Además, defendió la necesidad de "clarificar" la regulación del despido que recoge el texto del Gobierno.
"Tenemos plazo y vamos a trabajar dentro de ese plazo", declaró De Cospedal en una rueda de prensa en la sede del PP, al término de la reunión del Comité de Dirección, en la que se abordó la reforma laboral, el principio de acuerdo entre Gobierno y PP en materia de energía y la cumbre del G-20.
Por lo pronto, De Cospedal avanzó que sus enmiendas en la reforma laboral irán en dos direcciones: "descentralización" de la negociación colectiva y formación profesional, así como fomento de la contratación indefinida.
Según dijo, el PP quiere "una clarificación" de algunos aspectos que recoge el decreto-ley del Gobierno porque puede "crear más litigiosidad" y eso "más que beneficiar, complicar más la vida al mercado laboral".
"Si el Gobierno dice que un contrato de trabajo se tiene que considerar extinguido por causas económicas u objetivas por una razón o por otra, que lo deje claro, pero que no se quede al albur de árbitros o de tribunales porque estaríamos todo el día en un ámbito de litigisidad que es perjudicial para la empresa", señaló.
En cuanto a los cursos de formación, dijo que el PP cree que debe estar regulado de tal manera que exista "una íntima correlación" entre la formación profesional ocupacional de los trabajadores y la formación profesional tras salir de la ESO, sin que "esté ligado necesariamente" a que los sindicatos o la patronal reciban más o menos para cursos de formación.
Zapatero, "hacer los deberes"
Sobre la cumbre del G-20, De Cospedal indicó que "no ha habido grandes acuerdos", con la excepción del relativo a la reducción del déficit público y que debe "hacerse de acuerdo con la situación de cada país".
En este punto, se felicitó de que esta rebaja del déficit, que la viene demandando el PP desde hace más de dos años, "haya sido la receta fundamental" en la cumbre. "Ahora que acaba la Presidencia española de la UE y el G-20, esperamos que Zapatero se vuelva a centrar en España y tome las decisiones de política económica que hace falta tomar en nuestro país y haga sus deberes", enfatizó.
Preguntada por la oposición del PP a imponer un impuesto a la banca como defienden países como Reino Unido o Alemania, indicó que sobre este tema no se llegó a un acuerdo en el G-20 y recordó que en España ya hay un Fondo de Garantía de Depósitos. Además, expresó su temor a que el coste de ese impuesto pueda trasladarse a los clientes.
Hablar del futuro de Garoña
También se refirió al "principio de acuerdo" en materia energética que han alcanzando el PP y el Gobierno para "sentarse a hablar" acerca de "la necesidad de alternar y combinar en España absolutamente todas las energías disponibles, tanto las renovables como las tradicionales, entre las que está la energía nuclear". El objetivo, prosiguió, debe ser que la energía sea más barata para las familias y las empresas.
Además, la secretaria general del PP avisó que su partido pondrá sobre la mesa asuntos como el futuro de la central de Garoña, ya que, a su juicio, su cierre no puede depender de una decisión política sino de criterios de seguridad y criterios técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear.
Finalmente, indicó que el Grupo Popular "hablará con todos" los grupos parlamentarios para alcanzar acuerdos en las propuestas de resolución que se votarán en el Debate sobre el Estado de la Nación en la tercera semana del mes de julio.