"Queremos más mujeres conduciendo motos"
Josep Grañó, director de Harley Davidson para España y Portugal, ha convertido el Barcelona Harley Days en el encuentro de referencia en Europa. Este amante de las motos afirma que hay una conexión especial entre la ciudad y la marca: "Ambas comparten un estilo de vida mundial".
El español que compra una Harley, ¿cómo es?
Atraemos muchísima gente joven. El consumidor medio se sitúa en 37 años, la edad más baja de Europa. El 92% es hombre y el 8%, mujer. De una clase media, media alta. El 50% son profesionales liberales, autónomos, médicos, notarios, arquitectos, abogados, empresarios. Pero queremos más mujeres conduciendo, que no sean sólo pasajeras.
¿La crisis ha apagado la pasión por las motocicletas?
Esa locura no se ha reducido. 2009 fue un año difícil y pese a la caída del 60% de las ventas, Harley no perdió ninguno de sus concesionarios (30 en España y cuatro en Portugal), con lo cual mantenemos los puestos de trabajo.
¿Estadounidenses y europeos comparten el mismo valor de marca?
La Harley en Europa es una marca premium. Para el mercado americano es la moto por definición, es un pedazo de la historia.
¿Cómo cree que evolucionará el mercado este año?
En 2010 las cosas van muchísimo mejor. Esperamos vender 3.000 motocicletas, 800 más que el año pasado. El mercado de la moto grande, que es donde estamos nosotros, está creciendo un 42%, y Harley Davidson lo hace a más de un 70%. Esto se debe, además, a la calidad del producto, la fórmula de distribución a través de dealers exclusivos y a la propia marca. El pico máximo de venta fue en 2007 con 4.750 motos.
A partir de estas estimaciones, ¿prevé una mayor expansión?
Tenemos un plan limitado al respecto. Vamos a abrir un concesionario en Murcia, en una semana. En septiembre en Valencia, y para el próximo año estudiamos crear otros dos.