Obama da la bienvenida a "mayor reforma financiera desde la Gran Depresión"
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio hoy la bienvenida al acuerdo preliminar alcanzado en el Congreso para aprobar la "mayor reforma financiera en nuestro país desde la Gran Depresión".
En una breve alocución antes de partir hacia Canadá para participar en las cumbres del G-8 y el G-20, que agrupan a las principales economías del mundo, Obama aseguró que "el crecimiento económico y la prosperidad dependen de que contemos con un sector financiero firme y robusto".
El acuerdo entre los miembros de ambas cámaras sobre la imposición de restricciones a las operaciones por cuenta propia de la banca y un incremento de la supervisión sobre el mercado de derivados culminó tras más de veinte horas de negociaciones.
En concreto, el acuerdo salio adelante por 20 votos a favor y 11 en contra entre los miembros de la Cámara de Representantes, y obtuvo 7 sufragios favorables y 5 en contra por parte de los senadores. De este modo, el proyecto de ley al completo será sometido a votación la próxima semana en el Congreso y podría ser promulgada por el presidente el próximo 4 de julio.
Según The New York Times, la decisión se tomó tras 20 horas de discusión a puerta cerrada y el objetivo de los parlamentarios era terminar de acordar la reforma antes de que el presidente Barack Obama viaje a la reunión del G20 en Canadá.
El diario estadounidense asegura que esta reforma estuvo en los últimos meses bajo fuertes presiones de los mercados financieros y empresariales. Los republicanos llegaron a bloquear dos veces en el Senado la reforma, hasta que el 20 de mayo pasado los demócratas pudieron sacarla adelante en esta cámara.
El secretario del Tesoro de EE UU, Timothy Geithner, expresó su satisfacción por el acuerdo, afirmando que "la meta está a la vista" y destacó que el proyecto pactado por los miembros del comité es "fuerte" y representa "la mayor reforma financiera desde las que siguieron a la Gran Depresión".
En este sentido, el responsable del Tesoro estadounidense aseguró que la nueva regulación dotará de la mayor protección de la historia del país a los consumidores y evitará que las entidades asuman riesgos que puedan amenazar a la economía, a la vez que proporciona al Gobierno de las herramientas para proteger a los contribuyentes mejor frente a los daños de futuras crisis financieras.