Santamaría entrega más del 10% de Reyal a cajas de ahorros
Al igual que en otras grandes inmobiliarias españolas cotizadas, el presidente de Reyal Urbis está reduciendo su participación en el capital de la compañía intercambiando deuda por títulos. Rafael Santamaría, que hasta finales del mes pasado poseía más del 80% del capital de Reyal Urbis, tiene ahora el 70,3%.
Ibercaja, EBN Negocios y Unicaja han alcanzado, respectivamente, el 4,3%, 4,7% y 4,3% del capital de Reyal Urbis, según ha aparecido recientemente en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Las entidades financieras han adquirido títulos que estaban en manos de la sociedad Inversiones Inveryal, de Rafael Santamaría y su esposa, María del Mar Moliner.
Santamaría adquirió Urbis en 2006 en una opa pactada con el anterior propietario de la empresa, Banesto, en una operación valorada en 3.317 millones de euros, lanzada a través de Inversiones Inveryal. El mes pasado logró evitar el concurso de la compañía al acordar con la banca la refinanciación de una deuda de 4.600 millones.
Ibercaja explica en su comunicado a la CNMV que el 27 de mayo Inveryal entregó a la entidad 8,8 millones de acciones de Reyal Urbis como contraprestación por extinción anticipada de una opción de venta de acciones acordada en 2008.
Unicaja ha recibido por parte de la sociedad de Santamaría otras 8,8 millones de acciones, por las mismas razones que Ibercaja. La entidad EBN Banco de Negocio -que tiene como accionistas a Ibercaja, Caja Duero, CAM, SaNostra y Unicaja- no indica el motivo de la adquisición de 13,9 millones de acciones de Reyal Urbis.
Reyal Urbis cerró ayer en Bolsa con un valor de 1,7 euros por acción tras caer un 1,14%. La compañía perdió en el primer trimestre del año 51,8 millones de euros y aumentó sus ingresos hasta los 261 millones.
Reduce al 70%
Rafael Santamaría controla, según los registros de la CNMV, el 70,3% de Reyal Urbis. Hasta finales del mes pasado su participación comunicada al regulador del mercado era superior al 80% del capital. Reyal cerró ayer a un precio por acción inferior a los dos euros.