El Gobierno prorroga la negociación de la reforma laboral pese a la falta de consenso
Los líderes de sindicatos y patronal y el ministro de Trabajo no lograron ayer pactar la reforma laboral en el último día de plazo. Políticamente débil, el Gobierno ha decidido prorrogar las negociaciones para entregar otra propuesta con la que tratará de evitar un nuevo decreto unilateral. Sin embargo, éste verá la luz, con acuerdo o sin él, "antes de terminar junio", según el nuevo calendario fijado por Salgado.
Los plazos nunca han sido lo que se dice "rígidos" en los casi dos años que Gobierno y agentes sociales llevan buscando la concertación social. El límite de ayer para llegar a un acuerdo en torno a la reforma laboral había sido, sin embargo, calificado por todos los interlocutores como "definitivo". No importó. La necesidad del Ejecutivo, muy dañado políticamente por su drástico recorte del gasto social, de partir del consenso llevó a Trabajo a aceptar que las negociaciones entren de nuevo en tiempo de descuento. El nuevo horizonte, según anunció la vicepresidenta económica, Elena Salgado, es que la norma sea aprobada, pactada o no, "antes de terminar junio".
La cita de ayer por la mañana, que reunió al ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, con el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán y con los secretarios generales de CC OO, Ignacio Fernández Toxo y UGT, Cándido Méndez, transcurrió sin novedades en el guión. La patronal pugnó por abaratar el coste del despido y los sindicatos defendieron a ultranza que se mantengan las indemnizaciones actuales. "No hubo ningún avance con respecto al encuentro del sábado", revelan fuentes cercanas a la negociación. Justo la condición que el Ejecutivo barajaba para prorrogar las negociaciones, o tomar la determinación de legislar en solitario.
"Se ha constatado que persisten diferencias entre las partes", manifestaban éstas en un comunicado conjunto. "Sin embargo, todavía hay margen para el acuerdo", concluyen, indicando que habrá nuevas reuniones. Concretamente, según fuentes conocedoras del proceso, el Gobierno ha fijado ya dos citas más. En la primera, que tendrá lugar esta semana, Trabajo entregará a los agentes sociales un nuevo documento de propuestas, que se prevé más concreto que los dos anteriores. Sobre él espera cimentar el pacto. El segundo encuentro tendría lugar la próxima semana, cuando haya sido debatido internamente por los interlocutores.
Trabajo entregará una nueva propuesta esta semana para salvar el acuerdo
Llegados a este punto, nadie se engaña. Tras cuatro meses de infructuosas negociaciones ninguna de las partes se muestra excesivamente optimista. Deben lograr en días lo que no han podido hacer en meses, y todos dan por sentado que la reforma debe estar lista "en el entorno del 11 de junio".
Decreto basado en la negociación
¿Habrá pacto, entonces? "El Gobierno va a apurar hasta el último segundo y si no es así asumirá su responsabilidad recuperando todo el bagaje del diálogo del último año", sostuvo ayer la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín. Según explicó, si no hay acuerdo, el Ejecutivo planteará un decreto que recoja los temas que hay sobre la mesa de negociación que gozan de mayor consenso. Entre estos se encuentra la reordenación de las bonificaciones hacia los jóvenes, un plan de empleo para este colectivo o la facilitación de las reducciones de jornada. También incluiría guiños concretos a la patronal y a los sindicatos. Pese a ello, si la medida "lesiona los derechos de los trabajadores", repetían ayer en CC OO y UGT, la respuesta sindical será una huelga general.
Por su parte, el PP cayó de nuevo en la contradicción al apostar por una reforma laboral que "abarate la contratación", en lugar del despido, como había defendido en otras ocasiones.
Más patronales piden rebajas de sueldo del 5%
El ejemplo dado por el Ejecutivo al vulnerar el acuerdo salarial pactado con los funcionarios para imponer ahora una rebaja del 5% afecta cada vez a más convenios privados. La patronal, que acaba de firmar un acuerdo de negociación colectiva que establece aumentos de sueldo de "hasta el 1%" para este año, ha propuesto en algunas mesas "imitar la rebaja del Gobierno", denuncian desde la secretaría de Acción Sindical de CC OO. "En algunos casos, habiendo alcanzado ya un preacuerdo con incrementos moderados, se han presentado el día de la firma acompañados de los medios de comunicación para rechazar el convenio y pedir recortes del 5%", exponen. Es el caso del Convenio del Campo de Extremadura, que afecta a más de 60.000 asalariados. "No se trata de una práctica generalizada, pero hemos alertado a nuestras organizaciones porque es una actitud preocupante", añaden desde la central. Hay ya un par de decenas de convenios bloqueados bajo este argumento, que hayan sido detectados. Entre ellos se encuentran el estatal de yesos y escayolas, el de la siderometalurgia salmatina o el de las ambulancias privadas de Andalucía. Además, el propio recorte del Gobierno afecta a muchas de las subcontratas de la administración local y regional, añaden en CC OO.