Caja Madrid negocia la absorción de cinco pequeñas cajas regionales
Cinco pequeñas cajas regionales (Caixa Laietana, La Caja de Canarias, junto a las cajas de Ávila, Segovia y La Rioja) anunciaron el viernes que están en conversaciones con Caja Madrid para integrarse a través de una fusión fría. Con las 800 oficinas que aportarían, el grupo sumaría cerca de 3.000.
El baile va llegando a su fin y nadie quiere quedarse sin pareja. Con la fecha límite del 15 de junio, cuando el Banco de España cerrará la ventanilla para solicitar recursos al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), las cajas de ahorros se afanan en buscar compañeras de viaje y de destino.
Las frustradas conversaciones de Caja Ávila y Caja Segovia para integrarse en el grupo Banca Cívica (liderado por Caja Navarra), precipitaron el viernes los acontecimientos. Estas dos entidades, junto con La Caja de Canarias (de Las Palmas), Caixa Laietana y Caja Rioja comunicaron a la CNMV que mantienen conversaciones para integrarse con Caja Madrid.
Si las conversaciones fructifican, la fusión se realizará a través de un sistema institucional de protección (SIP). De este modo, las entidades compartirían algunas políticas y departamentos (riesgos, estrategia, tesorería, etc.), al tiempo que preservarían sus órganos de gobierno, su identidad corporativa y la gestión de la obra social.
Si Caja Madrid terminara asociándose con las citadas entidades reforzaría su posición como segunda caja del país. A sus 2.180 oficinas sumaría otras 810, y sus activos totales, de 192.000 millones de euros, crecerían en 36.000 millones. En cuanto a empleados, el grupo superaría los 19.000.
El presidente de Caja Segovia, Atilano Soto, aseguró el viernes que otras entidades podrían sumarse al proyecto en los próximos días.
Fuentes cercanas a Caja Madrid explicaron a la agencia Efe, que confiaban en que las conversaciones para la fusión cuajen antes de mediados de junio.
Petición de ayuda al FROB
Aunque aún no ha trascendido si el nuevo grupo solicitará ayudas al FROB, diversas fuentes aseguraban el viernes que sí que recurrirá a este instrumento. En concreto, cifran en 2.000 millones de euros el volumen de recursos que solicitarán Caja Madrid y sus socios.
De confirmarse esta abultada cifra, cobraría peso la teoría de que la entidad presidida por Rodrigo Rato, que había anunciado su intención de no participar en la primera oleada de fusiones, se habría visto obligada a tomar parte de una operación de integración para acceder al FROB. Dado el pequeño tamaño de las otras entidades, sería Caja Madrid quien recibiría la mayor parte de esos recursos.
Fuentes oficiales de las cajas implicadas no han reconocido este extremo, pero sí que reconocieron en un comunicado que con la fusión fría podrán "fortalecer sus ratios de solvencia y sus niveles de liquidez". Sin el dinero del FROB, los ratios de solvencia de Caja Madrid apenas variarían por absorber a cinco pequeñas cajas regionales.
La decisión de Caja Ávila y Caja Segovia de desmarcarse del grupo Banca Cívica para iniciar conversaciones con Caja Madrid y otras tres entidades causó el viernes un revuelo político en Castilla y León. El presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, aseguró que los máximos responsables de las cajas han mostrado "deslealtad personal e institucional".
Además, uno de los consejeros de Caja Segovia, José Luis Sanz Merino, que es representante del gobierno regional en la provincia, fue forzado a dimitir de su cargo en la entidad financiera.
La otra gran caja española, La Caixa, también confirmó el viernes que está en conversaciones con Caixa Girona, tal y como adelantó el viernes CincoDías. Aunque la entidad presidida por Isidro Fainé también había asegurado que no participaría en la primera ronda de fusiones, las presiones del Banco de España para dar salida a todas las cajas pequeñas le habrían hecho cambiar de opinión.
Sa Nostra aprobará en 10 días su unión a una alizanza virtual
Sa Nostra aprobará en diez días, en un consejo extraordinario, un protocolo de actuación para fusionarse con otras cajas de ahorros a través de un sistema institucional de protección (SIP). Un mes después, su asamblea general para decidir si ratifica o no el contrato de integración.Fuentes de la caja balear explicaron a Europa Press que por una cláusula de confidencialidad no pueden revelar las entidades con las que se está negociando la integración, si bien en las últimas semanas ha trascendido que mantiene conversaciones con Cajamurcia, Caja Granada y Caixa Penedès para intentar conformar una fusión virtual.Las citadas fuentes indicaron recordaron que Sa Nostra pretende obtener recursos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que vence el 30 de junio, por lo que concretará su proyecto de integración en los próximos días.
Los sindicatos temen la figura a utilizar en las fusiones frías
UGT y CC OO expresaron el viernes su preocupación por el hecho de que el instrumento sobre el que se articulará el sistema institucional de protección (SIP) liderado por Caja Madrid tenga consideración de banco.A falta de conocer cómo se desarrollará la fusión fría que unirá a la caja madrileña con La Caja de Canarias, Caixa Laietana, Caja Ávila, Caja Segovia y Caja Rioja, los sindicatos reivindicaron que la sociedad central del SIP tenga naturaleza de caja de ahorros para evitar la "bancarización" de la entidad."Nos preocupa que el SIP vaya a realizarse por la vía de la ficha bancaria. No somos partidarios de este tipo de fusiones frías porque es un paso a la bancarización y a la privatización", explicó a Europa Press el máximo responsable del sector en UGT, José Miguel Villa. En el mismo sentido se pronunció José María Martínez, su homólogo en, Comfia-CC OO.