NZ Patrimonio, del grupo Nozar, en concurso voluntario de acreedores
NZ Patrimonio, inmobiliaria del grupo Nozar, ha sido declarada en concurso voluntario de acreedores. Según publicó ayer el BOE, la declaración de concurso se realizó por auto fechado el pasado 23 de abril. De acuerdo a las cuentas de la filial del grupo controlado por la familia Nozaleda, NZ Patrimonio terminó el ejercicio 2007 con una deuda a corto plazo de 187,5 millones y a largo plazo de 172,3 millones. La empresa perdió ese año 6,4 millones.
Desde que en septiembre de 2009 entrara en concurso Nozar, la matriz del grupo de empresas controlado por la familia Nozaleda, varias filiales han ido solicitando la misma medida desde entonces. Nozar solicitó concurso con una deuda aproximada de 700 millones de euros.
En diciembre del pasado año entró en concurso la bodega oscense Enate. En enero de este año solicitó concurso Aguas de Panticosa, propietaria del balneario del mismo nombre ubicado en Huesca, en el Pirineo aragonés, y que cuenta con hoteles de cuatro y cinco estrellas.
Al mismo tiempo que Nozar solicitó concurso lo hizo otra de sus filiales, Lena. La administración concursal de Lena, integrada por Soledad García, de la Agencia Tributaria, y los abogados Javier Ramos y Ángel Rojo, advierten en el informe concursal de la sociedad que ésta "se ha vaciado patrimonialmente por acudir en auxilio financiero de la sociedad dominante".
Según publicó El País , los administradores concursales de Lena han demandado a la Agencia Tributaria la devolución de cuatro millones de euros que a su criterio salieron indebidamente de la masa activa para compensar deudas de otras empresas del grupo, entre ellas NZ Patrimonio.
Socios con problemas similares
En 2006 Nozar optó por participar en inmobiliarias cotizadas en lugar de salir a Bolsa. Adquirió porcentajes de capital de Reyal Urbis, Colonial, Astroc y Aisa. También participaba en una promoción conjunta con Martinsa Fadesa. La mayoría de esas empresas están hoy en concurso o rozándolo. La familia Nozaleda apostó por el capital de esas inmobiliarias, aunque fuera mediante la adquisición de títulos a cambio de activos, poco antes de que estallara la burbuja inmobiliaria en España. En septiembre de 2009 Nozar solicitó su entrada en concurso de acreedores.