Fonorte presenta concurso con 14 millones de pasivo
La constructora vasca adelanta las adhesiones del 80% de los acreedores con un plan de pago a cuatro años
Fonorte presentó ayer en el Juzgado de lo Mercantil Número 2 de Bilbao el concurso voluntario de acreedores con un pasivo cercano a los 14 millones. La filial del grupo Afer había solicitado el pasado 28 de enero ante el mismo juzgado un procedimiento preconcursal que pudiera haber derivado en la citada suspensión de pagos o en una refinanciación de la deuda. Al final, el concurso se ha presentado antes de plazo (expiraba el próximo 28 de mayo) porque Fonorte ya ha constatado la opinión de todos sus acreedores.
La mayoría de ellos (que suponen el 80% del pasivo total) han aceptado las propuestas planteadas por Fonorte durante la fase preconcursal, según fuentes cercanas al proceso. Este acuerdo de principios incluye unas quitas del 40% y el pago del 60% restante a cuatro años, con uno de cadencia. En la práctica, esto supone que los primeros pagos a los acreedores pudieran producirse a partir de finales de mayo de 2010.
Así, Fonorte tiene avanzado gran parte del proceso del concurso, puesto que el juez necesita para admitirlo a trámite la adhesión a las condiciones del mismo de una quinta parte del pasivo, algo que ya se ha conseguido, según las mismas fuentes. Luego, los administradores designados por el magistrado tendrán que acercarse a los acreedores para buscar un pacto, pero esta fase también se ha adelantado porque ambas partes trabajarán con las condiciones citadas del 40% de quita y con el pago a cuatro años.
Fonorte, con dieciséis años de trayectoria profesional, tiene en la construcción de la Torre Iberdrola a su proyecto emblemático. Cada día, la fachada del inmueble cambia de aspecto ante la mirada de decenas de miles de vizcaínos y visitantes. Fonorte también ha dejado su huella en otros edificios que forman parte de la imagen urbanística de Vizcaya, como las torres de viviendas diseñadas por el arquitecto japonés Isozaki para la zona de Abandoibarra de la capital vizcaína, el Hotel Meliá de cinco estrellas (antes Sheraton) o los pabellones del recinto ferial del BEC en Barakaldo.
Fuentes de la compañía han señalado que el respaldo de los acreedores permitirá la continuidad de su actividad empresarial. La filial de Afer debe presentar ahora un plan de viabilidad a sus acreedores, según los compromisos trasladados en la fase preconcursal, así como un expediente de regulación de empleo (ERE) que supondrá el recorte de parte de los 120 empleos directos de la compañía.