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Miedo en los mercados

La crisis se endurece en las Bolsas

El Ibex cae un 13,8% en la peor semana desde 2008, mientras los expertos vuelven a considerar el riesgo de un crac crediticio.

La crisis se endurece en las Bolsas
La crisis se endurece en las BolsasREUTERS

Hace un año las Bolsas comenzaban a recoger los primeros indicios de la recuperación económica. Pero la savia ha dejado de fluir hacia los brotes verdes. 30 meses después de que las subprime dieran comienzo a la peor crisis financiera desde 1929, la situación se ha enrevesado. Las Bolsas han llegado al final de la semana con un balance más que negativo. El Ibex ha perdido un 13,8%, el peor resultado en el periodo desde octubre de 2008, tiempo después de que se produjera la quiebra de Lehman Brothers.

Los índices de los países periféricos de la zona euro han sido los que más han sufrido. El ASE de Atenas y el PSI 20 de Portugal han retrocedido el 12,8% y 10,6%. Tan poco se han quedado lejos el FTSEMib de Milán, el Cac, de París y el Dax de Fráncfort, que cedieron el 12,6%, 11%, 6,85%, respectivamente. El Footsie 100 de Londres cayó el 2,6% el viernes y la libra a mínimos de un año frente al dólar, tras conocer el resultado de las elecciones, que dieron la victoria a David Cameron, aunque sin mayoría absoluta; en cinco jornadas tiene un recorte del 7,75%.

Europa está sufriendo con creces la nueva dimensión que ha tomado la crisis, que mira ahora hacia la integridad del euro -que ha pasado de 1,32, a 1,27 en cinco días- y los problemas de los déficit y la deuda de los gobiernos. Estados Unidos ha conseguido mantenerse durante mucho tiempo al margen de los problemas del otro lado del Atlántico ayudado por la corriente de cifras económicas positivas que han ratificado la salida de la recesión. Pero la preocupación de Europa ha terminado por salpicar a los inversores de EE UU. El S&P y el Dow Jones se han dejado el 6,4% y 5,7%. El jueves, además, los indicadores estadounidenses vivieron una sesión de infarto: el Dow Jones llegó a caer el 9,2%, el mayor descenso desde 1987, durante algunos minutos por órdenes erróneas en determinados valores, que provocaron un arrastre de los sistemas informáticos de los brókeres.

La tensión en los mercados de deuda también ha sido extrema. La prima de riesgo de España cotiza en récord, a 164 puntos básicos, la de Grecia, a 801 y la de Portugal, a 185. El tipo de interés de los bonos a 10 años de estos tres países ha escalado al 4,43%, 12,44% y 6,28%. "Los bonos griegos están cotizando un posible impago. Al hilo de esto, los inversores comienzan a penalizar a los mercados más débiles. No se puede decir que España esté en riesgo de solvencia, eso no es verdad. Lo que ocurre es que los inversores ven que no hay medidas claras para reducir el déficit y piden unos spreads superiores. Es un tema más de confianza", explica Jordi Padilla, gestor de banca privada de Banco Popular.

Esa falta de confianza ha vuelto a trasladarse al sistema interbancario, igual que ocurrió cuando la crisis adquirió el cariz de crisis crediticia en 2007. El viernes el líbor, el tipo al que se prestan los bancos en dólares en el Reino Unido, pasó en un día del 0,374% al 0,428%, es la mayor subida desde noviembre de 2008.

Los inversores tampoco respondieron en esa jornada a los mensajes con un grado optimista. En España, por ejemplo, se conoció que la economía salió técnicamente de la recesión en el primer trimestre al crecer el 0,1%. A nivel de Europa, fue destacable que el parlamento alemán aprobara el paquete de ayudas a Grecia, y en Estados Unidos, la creación de 290.000 puestos de trabajo en abril. Todo dio igual: El Ibex cayó el 3,28%, el Euro Stoxx, el 4,26%, y el S&P, el 1,53%. "La crisis de deuda europea no es la única razón por la que dominan las órdenes de venta. Todo tiene mucho que ver con la vuelta a la aversión al riesgo" explica Eduardo Ricou, de Saxo Bank.

Lo que ha quedado claro, y así lo han reflejado distintos indicadores en la última semana, es que las Bolsas vuelven a cotizar un riesgo sistémico. Estamos donde estábamos: en uno de los peores momentos de los últimos 30 meses. La incipiente recuperación que se vio en el ejercicio pasado, ha quedado en cierta manera empañada ahora por la abultada deuda pública. "Lo más preocupante es que todo lo que está pasando llega en un momento de incipiente recuperación económica. La consecuencia es que dañará las expectativas de crecimiento y de los resultados. Los empresariales y consumidores volverán a desconfiar y eso es un hándicap para una situación en donde la demanda privada debería sustituir a la pública", detalla Padilla.

Los analistas están convencidos de que detrás de las recientes bajadas de las Bolsas se han combinado expectativas reales, pero también irracionales. El origen del último tramo de la crisis está en Grecia. Los inversores temen que los problemas del país heleno tenga ramificaciones en otros países europeos como España y que afecte a la integridad del euro. Pero la especulación también ha hecho mucho daño a las Bolsas. El Ibex perdió más de un 5% el martes entre rumores de una posible rebaja de rating por Fitch y Moody's y la necesidad de un rescate de 280.000 millones.

Por otro lado, los mercados han roto soportes técnicos. Así lo reconocen los expertos, que en cualquier caso, esperan que la volatilidad siga siendo elevada. Por el momento, la mayoría aconseja evitar renta variable española y en especial el sector financiero. "Pueden pasar meses hasta que se restablezca la fortaleza", explica Julián Coca, gestor de Inversis.

Desde Banco Sabadell, señalan que la confirmación de un suelo en las Bolsas depende en buena medida de factores políticos: "La contención de las caídas no pasa por la ayuda a Grecia, sino por que el panorama fiscal de los países se aclare".

Por otro lado, Jordi Padilla añade que se necesita tiempo para que los mercados retomen la confianza. "Está pasando como a finales de 2008. Había riesgo sistémico y se aprobaban planes millonarios y los mercados no reaccionaban".

El deterioro es tan grave que los mercados, como en 2008, sólo ven esperanza en una rápida intervención por parte del BCE y la Fed. El viernes, al cierre de esta edición, los líderes de la zona euro se encontraban en una cumbre que estudiaba un sistema de "intervención multilateral" en el mercado con el fin de atajar los ataques especulativos a la divisa y a la deuda pública.

Las claves del escenario actual

¿Por qué caen tanto las bolsas?La solvencia de Grecia está cuestionada. S&P ha bajado su calidad crediticia a bono basura y los mercados temen que países con altos déficit y elevada deuda pasen por lo mismo. El euro está reflejando las debilidades políticas de la región. Todo esto ha generado una falta de confianza y una vuelta de la aversión al riesgo por parte de los inversores.Las especulaciones y rumores sobre posibles rebajas de rating o necesidades de ayuda a países europeos han desestabilizado las Bolsas.Técnicamente, la mayoría de los índices ha roto soportes importantes. El Ibex está en tendencia bajista a medio plazo. Ha perdido los 9.200 puntos, el soporte más importante ahora, y podría bajar hasta el 8.800.Las expectativas sobre los resultados empresariales y de crecimiento se están deteriorando para los próximos meses, en un momento en que la recuperación es incipiente.¿Qué pide el mercado?La reunión del BCE del jueves decepcionó en parte a los mercados, que esperan algún mensaje de ayuda, que diera liquidez. El viernes se rumoreó de que la institución podría decidir este fin de semana una inyección de 600.000 millones.Para contener las caídas, Banco Sabadell, considera que a corto plazo debería comunicarse medidas de ajuste fiscal y estructurales creíbles, mientras que a medio plazo sería aconsejable que se diera una mayor integración fiscal de la zona euro.Para España, los expertos reclaman "medidas serias y contundentes". "No hay vuelta atrás, el golpe será más alto o más bajo dependiendo de cómo y cuándo se tomen las decisiones", dice Javier Barrio, de BPI.Indicadores de mercado, como Investor's Intelligence de EE UU, aún deben mejorar. También hay expertos que creen que las valoraciones deberían ser más atractivas.

Aún se gana dinero

En medio de tanto pesimismo, hay margen para que algunos inversores continúen disfrutando. Aquellos que supieron ver el momento y entraron en la Bolsa española con los mínimos de marzo de 2009 y no han vendido, han visto mermadas sus ganancias, pero siguen siendo jugosas. El Ibex está un 32% por encima de ese nivel, mientras en lo que va de año acumula un recorte del 24%.La mayoría de los valores se mantienen por encima de aquellos mínimos que marcaron un cambio de tendencia, alcista, para la Bolsa. Bankinter es uno de los pocos desafortunados, ya que ha caído a los niveles más bajos desde agosto de 2004. Sacyr, Grifols y Acciona han perforado igualmente los mínimos de marzo de 2009.En cuanto a 2010, más de 20 compañías cotiza en los niveles más bajos, entre ellos Telefónica, Santander y BBVA.

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