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La guerra del ahorro no llega a los fondepósitos

La caída del euríbor deja en mínimos su rentabilidad, del 0,3% en el año

La crisis de liquidez del otoño de 2008 y la ebullición de aquel momento en la oferta en depósitos a plazo trajo una época de esplendor para los fondepósitos, fondos de inversión que invierten en depósitos a plazo. Los tipos de interés de entonces permitieron rentabilidades para estos fondos superiores al 4%. Sin embargo, la nueva oleada de imposiciones a plazo que ofrece la banca en la actualidad -con remuneraciones de hasta el 4% anual- no promete trasladarse con la misma intensidad a la rentabilidad de los fondepósitos, que deben invertir al menos la mitad de su patrimonio en depósitos.

Más bien al contrario, estos fondos han perdido brillo con la caída de tipos de interés y el derrumbe del euríbor y ahora equiparan su rentabilidad con la de los fondos monetarios. "Por lo general, los depósitos para clientes institucionales se pagan al 1,3% o 1,4%", reconocen en el sector, donde puntualizan que las ofertas que tiene ahora la banca en el escaparate están dirigidas a clientes particulares, no a institucionales, y exigen vinculación, de manera que el cliente no abandone la entidad al vencimiento del depósito. En lo que va de año, la rentabilidad acumulada por los fondepósitos apenas llega al 0,3%, en el mejor de los casos, según Vdos Stochastics. La rentabilidad mejora echando la vista atrás, en que el fondepósito de Banesto arroja una ganancia acumulada en los tres últimos años del 12% y el de Cajasol, del 9,5%. Ahorro Corporación, Santander, Caixa Catalunya, Cajamar o CCM también tienen fondepósitos en cartera.

Ahorro Corporación gestiona 1.400 millones de euros en fondepósitos, entre el propio fondo de la gestora y otros siete de distintas cajas de ahorros. Marcelo Casadejús, director de marketing de Ahorro Corporación, reconoce que la comparativa resulta ahora más favorable al depósito ya que el fondepósito, además de una menor rentabilidad, requiere también el pago de una comisión. Como alternativa de inversión para un perfil de ahorro conservador, Casadejús apuesta por fondos garantizados. "Son mejor opción que un fondepósito e incluso que un depósito", defiende, con el argumento de la ventaja fiscal propia de los fondos, que permiten los traspasos sin tributar.

Las gestoras no acceden a las mejores ofertas en depósitos, para clientes particulares

En este sentido, y a falta de una rentabilidad atractiva, los fondepósitos pueden ser un refugio para inversores de fondos de Bolsa que quieran escapar de las turbulencias de la renta variable o de la mínima rentabilidad de los fondos monetarios. Así, el patrimonio se puede traspasar y demorar la tributación hasta el momento del reembolso. Aun así, "los fondepósitos rentan más que los fondos monetarios de deuda soberana", apuntan resignados en el sector.

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