Fondos que reparten el dividendo de las empresas
BBVA lanza un producto de Bolsa española con retribución semestral
En el mundo de las instituciones de inversión colectiva se distingue entre fondos de acumulación y fondos de reparto; la diferencia estriba en que los segundos reparten periódicamente un dividendo a sus partícipes. En España no existe tradición de fondos de reparto, más allá de las carteras de renta fija que pagan un cupón periódico a los inversores. Pero comienzan a aparecer fondos de renta variable que distribuyen entre sus partícipes el dividendo que perciben de las empresas en que invierten. Lo hacen los fondos cotizados o ETF, que más se parecen a una acción que a un fondo, y comienzan a hacerlo algunos fondos de inversión tradicionales.
BBVA Asset Management acaba de registrar en la Comisión Nacional del Mercado de Valores un fondo denominado BBVA Bolsa Plan Dividendo con esta peculiaridad. La cartera invierte hasta un 75% en renta variable, principalmente española. Son valores del Ibex 35 que tengan una política de reparto de dividendos. La particularidad de este fondo es que semestralmente reembolsará a los partícipes hasta el 95% de los rendimientos -netos de retenciones- acumulados por los dividendos recibidos por el fondo de las empresas que integran la cartera. Los reembolsos se realizarán el 31 de enero y el 31 de julio, fechas que coinciden con épocas en que tradicionalmente las compañías cotizadas retribuyen a sus accionistas. El reparto de dividendo entre los partícipes se realiza mediante el reembolso de participaciones del fondo. Si en algún momento el fondo no percibe dividendos, no se realiza el reembolso de participaciones.
El de BBVA no es el único fondo de estas características. Santander Asset Management tiene otro fondo similar, denominado Santander España Reparto, que invierte principalmente en compañías del Índice general de la Bolsa de Madrid y que abona semestralmente, en concepto de dividendo, un porcentaje variable de hasta el 90% de los rendimientos -netos de retenciones- acumulados por el fondo, bien por el pago de dividendos, bien por el pago de intereses y cupones.
El dividendo que pagan los fondos no goza de la exención fiscal de 1.500 euros
A diferencia de los ETF o de las acciones, la desventaja de estos productos es que el pago de dividendo del fondo no goza de la exención de tributación de los primeros 1.500 euros cobrados en concepto de dividendo que sí tienen las acciones. El dividendo del fondo tiene una retención del 19%, tipo al que tributan los 6.000 primeros euros percibidos. El resto tributa al 21%. La retención se aplica tanto si el dividendo se abona como tal, como si se hace en forma de reembolsos de participaciones. En este caso, sin embargo, la ganancia por el reembolso puede compensarse con otras pérdidas patrimoniales.