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Columna
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¿Volar con Easyjet? Con mucho gusto

En la junta de Easyjet se deleitan consigo mismos constantemente. El pasado diciembre, Mike Rake estaba "entusiasmado" de asumir la presidencia de la aerolínea británica, cuando el consejero delegado Andy Harrison dijo que le "encantaba" tanto el trabajo que se marchaba. En enero, Rake estaba complacido de dar la bienvenida al nuevo director financiero, y ahora está encantado con su nueva consejera delegado, Carolyn McCall.

A pesar de lo encantados que todos puedan estar, no tienen experiencia en dirigir una compañía aérea. Y tampoco es que dejen atrás negocios en plena forma. La carrera de McCall se ha desarrollado en el Guardian Media Group, una compañía establecida para apoyar al periódico The Guardian, y que perdió 90 millones de libras el año pasado. El nuevo director financiero viene de EMI, el grupo de música de Reino Unido que actualmente lucha por evitar que le absorban los acreedores.

El año pasado, los ejecutivos de Easyjet mantuvieron una disputa públicamente con Stelios Haji-Ioannou, fundador de la compañía y que controla el 40% de las acciones. Ellos vieron la crisis financiera como una oportunidad para expandirse donde las otras empresas estaban patas arriba -en Italia, por ejemplo-. æpermil;l pensó que era el momento de que su creación empezara a pagar algo a cambio.

El resultado es un compromiso. En lugar de intentar conquistar el mundo del low cost, serían más prudentes en expandirse en el futuro. Mientras Rake no acaba de prometer del todo pagar los dividendos, el mes pasado dijo en la reunión anual de la junta que pensaría en ello.

Sea lo que sea lo que pensara entonces la junta, no vale de guía para el futuro, ya que los directores cuyos puntos de vista son fundamentales para tomar decisiones a nivel financiero aún no han llegado.

Aún así, sin duda, cogerán el tranquillo de los controles con suficiente rapidez. No muchas compañías cuentan con comités de litigios para tratar los conflictos con los accionistas que se quedan en la junta, aunque McCall sabe de disputas. Estaba en la junta de Tesco en una desagradable pelea entre el minorista y The Guardian.

El flujo de noticias inquietantes parece haber tenido poca influencia en el precio de las acciones de Easyjet, que ha despegado suavemente desde que se cerró la brecha de la junta. El negocio permanece encantadoramente robusto. Tal vez pilotar esta caja sea un pastelito después de todo.

Neil Collins

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