ETA asesina por primera vez a un policía francés
El tiroteo en el que resultó muerto en París un policía francés es el quinto enfrentamiento armado que miembros de la banda terrorista han mantenido con las Fuerzas de Seguridad galas desde 1996, pero el primero en el que resulta muerto un agente.
El más reciente hasta el de este martes tuvo lugar el 8 de junio del año pasado en la localidad de Saint-æpermil;nimie, en el sureste de Francia, cuando un gendarme resultó herido en un tiroteo con dos presuntos etarras, que previamente habían robado dos coches. El tiroteo se produjo a primera hora de la tarde, cuando los gendarmes perseguían a un presunto etarra que había robado un coche en la localidad cercana de Blajoux.
El enfrentamiento anterior había tenido lugar el 28 de noviembre de 2001, cuando otro gendarme resultó herido de gravedad en un tiroteo con miembros de ETA en la localidad de Lucq-de-Béarn, en el suroeste del país. La justicia francesa condenó en febrero de 2008 por esos hechos al ex jefe militar de ETA Juan Ibon Fernández Iradi, "Susper", a 30 años de cárcel.
Aquel tiroteo se produjo dos semanas después de otro intercambio de disparos que las autoridades francesas atribuyeron a miembros de la banda terrorista. Sucedió el 17 de noviembre de 2001, cuando un gendarme resultó herido de bala cuando seguía a una furgoneta que se había saltado un control de alcoholemia en las proximidades de Pau (suroeste).
El conductor de la furgoneta se detuvo en una carretera local y disparó contra el agente. El primer tiroteo con las Fuerzas de Seguridad francesas que se atribuyó a ETA ocurrió el 27 de noviembre de 1996, cuando un policía del Servicio de Aduanas francés resultó herido grave mientras perseguía en moto un vehículo que huía de un control policial en la localidad de Astaffort (suroeste). El conductor del automóvil -que fuentes de la lucha antiterrorista identificaron entonces como Eusebio Arzallus Tapia, alias "Paticorto"- disparó contra los agentes y logró escapar.
Además de estos tiroteos, ETA ha cometido al menos dos atentados en Francia contra ciudadanos españoles, el último de ellos el 1 de diciembre de 2007 en la localidad gala de Capbreton (suroeste), en la que fueron asesinados los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero, que participaban en labores de seguimiento a la banda terrorista.