Lloyds, en el camino de la recuperación
Eric Daniels ha estado en lo cierto. El presidente del Lloyds Banking Group salvó el cuello el último verano al predecir muy seguro que los préstamos incobrables habían alcanzado su máximo. Parece que lo han hecho, pero la caída el viernes del 6% en el precio de las acciones indica que los inversores aún no se fían totalmente.
Las pérdidas en préstamos ascendieron a 10.500 millones de libras en la segunda mitad de 2009, por debajo del máximo de 13.900 millones en los primeros seis meses. El aumento brusco en Irlanda significó que las deudas incobrables fueron ligeramente superiores en el cuarto trimestre que en los tres meses anteriores. Aunque el banco piensa que ahora continuarán cayendo a una tasa del 20% cada seis meses.
Las alabanzas a Daniels deben ser contextualizadas. Después de todo, fue el responsable del acuerdo con HBOS que ocasionó una enorme cantidad de deudas incobrables a Lloyds. El banco tiene un balance menor que el Royal Bank of Scotland, pero el último año canceló 10.000 millones de libras, superior a los de su rival más grande.
Sin embargo, Lloyds ha tenido un segundo semestre fuerte. A diferencia de RBS, Daniels ha sido capaz de negociar las cesiones limitadas con la Comisión Europea. Entonces mantuvo el tipo para impulsar el capital del banco en 22.500 millones de libras, permitiendo escapar del costoso plan de garantía de activos del Gobierno británico. Daniel tiene todavía que hacer algo con los cerca de 157.000 millones de libras de financiación del banco garantizados por el Gobierno, una gran parte de lo que cuesta sólo 50 puntos básicos sobre la tasa interbancaria. Daniels piensa que el banco puede refinanciar todo en el mercado, en parte reduciendo su balance en 140.000 millones de libras en los próximos años. Que Lloyds sea capaz de hacerlo sin ampliar sus márgenes está por verse aún.
La cuestión más importante, sin embargo, continúa siendo si la economía británica seguirá recuperándose, ya que Lloyds es muy sensible al mercado de Reino Unido. Las previsiones de Lloyds para los pisos y los precios de las propiedades comerciales en 2010 parecen razonables. Sin embargo, cualquier señal que indique que la situación es demasiado optimista acelerará el pulso a los inversores.
George Hay