El euro cae a 1,36 dólares y la prima de riesgo de España se estabiliza
El nerviosismo desatado en febrero en los mercados por la incertidumbre que suscita el elevado endeudamiento de países como Grecia, Portugal o España ha generado importantes turbulencias tanto en el mercado de divisas como en el de la deuda. El euro concluye un mes de alta volatilidad en el entorno de 1,36 dólares mientras que el diferencial de la deuda española respecto a la alemana se ha situado en 75,5 puntos básicos después de haber llegado a rondar los 100 puntos básicos en el momento de máxima tensión.
El apoyo de la Unión Europea a Grecia y los esfuerzos de consolidación fiscal de los países en el punto de mira de los mercados -España, Portugal y Grecia- han permitido que la percepción de riesgo sobre la zona euro se mitigue algo en las últimas sesiones. Así, el euro, después de haber llegado a tocar un mínimo intradía de 1,344 dólares a mediados de mes cerró el viernes en el entorno de 1,3618, un nivel en cualquier caso bastante inferior a los 1,3863 a los que inició el mes de febrero.
La evolución de la prima de riesgo sobre España, según refleja el diferencial entre el bono español a 10 años y el alemán al mismo plazo, también concluye un mes de alta volatilidad. El miedo suscitado a principios de mes por el rápido deterioro de las cuentas públicas provocó que el diferencial llegara a alcanzar los 100 puntos básicos. En las últimas sesiones, los esfuerzos del Gobierno por transmitir confianza a la comunidad inversora internacional, así como el plan de estabilidad financiera enviado a Bruselas o las propuestas para reformar tanto el mercado laboral como el sistema de pensiones han servido para tranquilizar a los mercados.
El viernes la rentabilidad del bono español a 10 años concluyó en el 3,86% mientras que la del bono alemán se situó en el 3,1%, lo que dejó el diferencial entre ambos en 75,5, un nivel muy alejado del máximo alcanzado este mes.
La prima de riesgo sobre España se ha visto aún más afectada en otros momentos de esta crisis y en febrero de 2009, en el momento de máxima tensión, llegó a superar los 128 puntos básicos. Desde la llegada del euro, en los últimos diez años, la media ha rondado los 21 puntos básicos.