La constructora Ploder formaliza su entrada en concurso de acreedores
La constructora Ploder ha formalizado hoy el concurso voluntario de acreedores ante el Juzgado de lo Mercantil número 9 de Madrid dos años después de comprar Uicesa, tras la imposibilidad de llegar a un acuerdo con las entidades y los proveedores para recorta una deuda de 315 millones de euros.
Ploder no ha podido evitar entrar en concurso de acreedores dos años después de que se formalizara la adquisición de Uicesa. Esa operación fue comunicada a finales de 2006 y el objetivo anunciado era el de convertir al grupo resultante en una de las principales compañías de construcción del país.
Ploder, que ha agotado el plazo que le otorgaba la reforma de la Ley Concursal para intentar pactar un plan de pagos y de viabilidad, estaba especializada en la construcción de obra civil y Uicesa en el mercado residencial.
Según fuentes jurídicas consultadas por EFE, la constructora ofrecía pagar a sus acreedores el 60% de los importes que les adeudaba en un plazo de tres años, lo que les obligaba a renunciar al 40% restante.
Los principales acreedores de Ploder eran las entidades financieras, a las que debía cerca de 200 millones de euros, mientras que el resto (115 millones) correspondía a proveedores.
Acuerdo con los sindicatos
La constructora sí ha logrado llegar a un acuerdo con los sindicatos para rebajar su número de empleados, de forma que presentó a principios de febrero ante el Ministerio de Trabajo un expediente de regulación de empleo (ERE) para rescindir 188 puestos de trabajo, equivalentes al 74% de su plantilla.
La constructora facturó 504 millones de euros en 2008, un 27,7% menos que en el ejercicio anterior, gracias sobre todo a la obra civil (proyectos de obras y vías ferroviarias) y en menor medida a la construcción residencial tanto protegida como no protegida, que todavía representaba el 36,5% de su cifra de negocio.