Corbacho propone someter a "reflexión y debate" el aumento de las pensiones
Después de los vaivenes que el Gobierno ha protagonizado en sus propuestas para reformar el sistema de pensiones, el ministro Celestino Corbacho ha querido "zanjar definitivamente" esta tarde en el Congreso la polémica sobre el aumento del actual periodo de cálculo de estas prestaciones. No ha hablado de cifras, pero sí de someter este tema "a reflexión y debate".
La comparecencia del ministro de Trabajo en la Comisión del pacto de Toledo ha estado rodeada de una gran expectación. Incluso la diputada Rosa Díez se ha estrenado en este órgano de debate, algo que le ha sido recordado en privado por la diputada socialista Isabel López i Chamosa. La entrada de Celestino Corbacho a la Comisión ha sido seguida por un abultado número de cámaras de televisión y micrófonos.
El ministro llevaba escrito en el folio nueve de su discurso la respuesta a uno de los temas más polémicos que han focalizado en las últimas semanas los tropiezos del Gobierno sobre la reforma de las pensiones. Se trata de la fórmula empleada para el cálculo de la pensión, que en un primer borrador enviado a Bruselas pasaba por ampliar el plazo de 15 años ahora vigente a los 25. "Quisiera zanjar definitivamente la polémica suscitada sobre este asunto. El documento no establece ningún aumento del periodo de cálculo aunque sí entiende el Gobierno que este tema debe ser objeto de reflexión y debate", ha dicho Corbacho a los miembros de la Comisión del Pacto de Toledo.
El objetivo de esta reflexión, según el ministro, debería ser "la búsqueda de una mayor equidad interna del sistema que refuerce la relación entre el esfuerzo contributivo realizado y la prestación reconocida". A su juicio, hay que evitar que el procedimiento de cálculo de la pensión de jubilación "penalice a los trabajadores que son despedidos al final de su vida laboral".
Corbacho ha señalado que la intención del Gobierno es promover una "aplicación moderada y no traumática" de la reforma que favorezca la equidad del sistema de pensiones. Una de las palancas que hacen necesaria su reforma, ha dicho, es el envejecimiento de la población. "De aquí a 2050, la población mayor de 64 años duplicará su tamaño, pasando de 7,6 millones a 15,3 millones en 2049", ha indicado el ministro.
Otro principio es el de la gradualidad. "Los ciudadanos deben tener claro que las reformas no afectarán a los actuales pensionistas y sólo de forma muy moderada a los trabajadores más veteranos", ha asegurado.
Corbacho ha propuesto a los grupos políticos "frenar el recurso a la jubilación anticipada" y "retrasar la edad de jubilación". "Hay que acabar con la cultura de la prejubilación", ha sentenciado. Entre las propuestas del Gobierno ha destacado la limitación de las reducciones de plantilla en las empresas con beneficios, la imposición a las empresas de la cofinanciación de los sobrecostes producidos por la expulsión temprana de los empleados del mercado laboral, el incremento más allá de los 52 años de la edad mínima de jubilación por aplicación de coeficientes reductores y el fomento de la jornada flexible durante los últimos años de la vida laboral.
El ministro también ha anunciado la intención del Ejecutivo de reformar las pensiones de viudedad, estableciendo más garantías en los casos de violencia de género y en el supuesto de las viudas que carecen de otros ingresos y acceden a la pensión en edades avanzadas.