Los inspectores denuncian el alza de la presión de la Agencia Tributaria para elevar la recaudación
La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) criticó hoy que la Agencia Tributaria les haya exigido mejorar en un 15% sus objetivos de este año con la única intención de recaudar más, lo que obligará a un "trabajo precipitado y de escasa profundidad investigadora".
Según la IHE, el "desmedido afán" de la Agencia por recaudar deuda ha sido la razón por la que ha establecido estos objetivos "al margen de la realidad", que también supondrá una mayor presión para los contribuyentes.
La asociación insistió en que es "inasumible" el aumento de la carga de trabajo de los inspectores, en un momento en que la Agencia cuenta con menos medios y su presupuesto se ha reducido, dicen, en un 6 por ciento.
En rueda de prensa, el secretario general y portavoz de IHE, Francisco de la Torre, aseguró que el 78 por ciento de los inspectores está en contra de la medida y pide "que se les deje hacer su trabajo de la forma que creen que se debe hacer".
De la Torre indicó que con este aumento se intentan mantener las cifras de recaudación del año pasado, que según IHE ascendió a la suma histórica de 4.000 millones de euros por liquidación de actas de inspección, aunque matizó que "en ningún país avanzado las inspecciones constituyen la parte del león de la recaudación".
Asimismo, IHE denunció los cambios producidos en el baremo de productividad, que supeditarían las retribuciones variables de los inspectores al número de expedientes cerrados.
De la Torre señaló que, en función de esta nueva medida, un inspector de Hacienda "tendría que realizar nueve de cada diez inspecciones" para cumplir los objetivos, lo que, a su juicio, sería algo semejante a una "huelga de celo" y ofrecería a la opinión pública una imagen "lamentable".
Aun así, el secretario de IHE aseguró estar convencido de que los inspectores "no van a prevaricar y actuarán en todo momento conforme a Derecho", si bien reconoció que existían ciertos "temas grises" respecto a los que se podrían tomar "decisiones radicales que perjudicarían a todos y sobrecargarían a los tribunales".
Por otra parte, de la Torre afirmó que el incremento de los objetivos "dificultará la lucha contra el fraude fiscal", puesto que primaría "la comprobación sobre la investigación".
Agencia rechaza acusaciones
La Agencia Tributaria aseguró que sólo aumenta la presión que ejerce sobre los defraudadores porque es uno de sus "objetivos irrenunciables", junto a la idea de ofrecer mejores servicios a los que sí cumplen con sus obligaciones tributarias facilitándoles el pago de la deuda con diversos instrumentos, como los aplazamientos.
En declaraciones a Europa Press, fuentes de la Agencia Tributaria salieron así al paso de las críticas de la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE), que denunció hoy el "desmedido afán" recaudatorio de la Agencia al exigirles mayor presión sobre los contribuyentes con el único objetivo de aumentar la deuda recaudada.
De hecho, las fuentes de la Agencia Tributaria consideraron que "aún hay margen" para incrementar la lucha contra el fraude fiscal desde el uso de las nuevas tecnologías y la realización de mejores análisis de riesgo fiscal, así como desde la mejora de los procedimientos de trabajo de la Agencia.
Sobre las críticas de los inspectores en cuanto al objetivo marcado por la Agencia para 2010, las fuentes aseguraron que la cifra (15%) está en línea con la planteada en 2009 y recordaron que la Agencia Tributaria trabaja con este sistema de objetivos desde el año 1992.
Respecto a las trabas burocráticas denunciadas por el IHE, las fuentes afirmaron que estos procesos suponen un "elemento de calidad" que permite mejorar el trabajo de la Agencia y asegurar que no afecta al baremo de su productividad.