Huellas en Bruselas VII: Colette
Las tetas que escandalizaron y encandilaron a Europa hace 100 años también pasaron, por supuesto, por Bruselas.
Sidonie Gabrielle Colette (1873-1955) incluso heredó buena parte de su amor por la cultura y la libertad de una madre, Sido, que creció entre los ambientes literarios y periodísticos de la capital belga durante la segunda mitad del siglo XIX, según señala Madeleine Lazard en su biografía (editorial Gallimard, colección folio biographies).
La dramaturga y actriz francesa visitaría varias veces el país de acogida de su madre. Entre otras, en febrero de 1910, hace ahora un siglo, para representar en Bruselas La Chair (en la foto), que tanto soliviantó a la parte más conservata de la sociedad europea de la época. Algunas huellas de Colette se han perdido, como el teatro Folies-Bergère en la calle Croisades (detrás del Sheraton actual), que ya no existe. Otras, se conservan, como el hotel Metropole, donde se alojó alguna vez.
La misma sociedad aclamaría luego su éxito y en 1936, según detalla Lazard, regresó a Bélgica para recibir los honores de la Academia Real Belga. Por cierto, que durante el viaje desde Francia comprobó la "intransigencia" de los funcionarios del país de su infancia. Un revisor del tren intentó impedirle la entrada en Bélgica porque tenía el pasaporte caducado... pero tras una pequeña bronca, Colette siguió sin problemas hasta Bruselas.
Toda Europa acabaría rindiéndose ante una escritora que en 1945, con 72 años, ingresó por unanimidad en la Academia Goncourt francesa. Una de sus novelas más importantes, Chéri, ha llegado ahora a las pantallas cinematográficas bajo la dirección de Stephen Fears y con Michaelle Pfeiffer como protagonista femenina.
La obra de Colette se impuso a una biografía agitada y escandalosa para la Europa de 1900. Casada tres veces, bisexual, madre de una niña a los 40 años (¡en aquella época!) llevó "una existencia en la que", según su madre, "nada era banal". Un lujo, vaya.
Foto: Colette y George Vague representando La Chair en el Moulin Rouge parisino en 1908 (sacada de Barjaweb).
La UE del revés rastrea periódicamente el paso de figuras de todos los tiempos por las calles de Bruselas. Si tienes alguna sugerencia, puedes enviarla a LaUEdelreves@skynet.be.
Huellas anteriores: Calder, Buffalo Bill, Julio Cortázar, Agnés Varda, Karl Marx.