La campaña de Navidad alivia la caída del comercio en todo 2009
El comercio minorista cerró en 2009 su segundo año de crisis con un balance desigual. Por un lado, la caída de ventas se amortiguó al 5,4%, frente al 5,3% de 2008 por la reducción de precios; pero la destrucción de empleo fue dramática. El resultado de la campaña de Navidad apunta a que la crisis podría haber tocado suelo.
Las ventas minoristas, uno de los indicadores que mejor refleja el pulso del consumo interno, retrocedieron un 5,4% en términos constantes (eliminando el efecto precios) durante 2009, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este dato representa la segunda caída consecutiva tras el descenso del 5,3% contabilizado en 2008 y, según apuntan los números, se ha conseguido que no sea mayor gracias a la rebaja de precios aplicada por las empresas.
El único indicio de esperanza lo representa el comportamiento registrado por las ventas durante el mes de diciembre, cuando apenas descendieron un 0,5%, la menor caída desde abril de 2008.
Esta moderación en la tendencia bajista de la facturación del comercio se explica por la agresiva campaña de descuentos que aplicaron los establecimientos con el objetivo de reanimar a la demanda aprovechando el tirón de la campaña de Navidad.
La reducción de los márgenes evita un desplome mayor de la cifra de negocio
Distribución
Atendiendo a la clasificación por tipos de productos, las ventas registraron los peores resultados en todos aquellos relacionados con el equipamiento del hogar, que se desplomaron un significativo 16,2%. Mientras, las ventas de la alimentación retrocedieron un moderado 3,4% y las de equipo personal un 3,6%.
Por su parte, todos los modos de distribución protagonizaron una disminución de su negocio, excepto las grandes cadenas, que lograron culminar el ejercicio con un empate en su volumen de ventas.
Las grandes superficies, que reflejan el comportamiento de las ventas en locales con un tamaño superior a los 2.500 metros cuadrados, contabilizaron un retroceso en su facturación del 4,3%. Mientras, las pequeñas cadenas y las denominadas como empresas unilocalizadas fueron las fórmulas comerciales más perjudicadas por la contracción del consumo, al contabilizar descensos de sus ventas del 5,8% en ambos casos.
El comercio minorista registró descensos de la cifra de negocio en todas las comunidades autónomas. Los mayores se concentraron en Baleares (-8,4%) y en la Comunidad Valenciana (con un retroceso del 8,2%).
Coincidiendo con la estadística del INE, ayer la Cámara de Comercio de Madrid presentó su programa de ayudas incluido en el Plan de Fomento e Impulso del Pequeño Comercio y la Hostelería (Ficoh) de la región para contribuir a combatir la crisis. La Comunidad de Madrid y la Cámara de Comercio tienen previsto destinar cerca de 12 millones de euros en ayudas a las pymes comerciales y de la hostelería a través de esta iniciativa, que también cuenta con una línea específica de ayudas a fondo perdido por un importe de casi cinco millones de euros. El programa de ayudas del Plan Ficoh benefició el año pasado a 1.163 empresas madrileñas, lo que generó una inversión directa de 10 millones de euros.
En los dos últimos ejercicios este programa ha apoyado a un total de 2.828 pymes comerciales y del sector de hostelería de Madrid, lo que permitió generar una inversión inducida en el sector de 64 millones. Gracias a ello, se generaron 1.616 empleos y se consolidaron otros 12.078 puestos de trabajo.
40.000 cierres y 90.000 empleos menos
La Confederación Española de Comercio (CEC) reconoció ayer que el sector no se encuentra en una "situación ideal", por lo que demandó incentivos al consumo y medidas de carácter fiscal, como la aplicación de un IVA superreducido para los subsectores de hostelería y turismo y rehabilitación y reforma del hogar. En declaraciones a Europa Press, el secretario general de la CEC, Miguel Ángel Fraile, destacó que los datos del INE sobre el comercio minorista en 2009 reflejan un "leve repunte positivo en diciembre, que puede representar que el consumidor se despertó ante la agresiva campaña de Navidad". No obstante, Fraile explicó que dichas cifras no representan correctamente la situación de las empresas unilocalizadas. "No es lo mismo un comercio ubicado en una zona comercial que otro de un barrio", comentó, antes de asegurar que el sector ha recuperado ventas y afluencia a las zonas comerciales tradicionales, en detrimento del comercio de la periferia.Según datos de la CEC, el pequeño comercio cerró en 2009 alrededor de 40.000 establecimientos y perdió unos 90.000 empleos, especialmente en las "zonas más débiles de localización". Las estimaciones de cierre del ejercicio apuntan a un descenso medio de las ventas de entre el 7% y el 9%, que fue más acusado en el sector del equipamiento del hogar. Según los números de Estadística, en 2009 la ocupación cayó el 4%, lo que se traduce como la primera cifra negativa desde 2000, ya que desde ese año siempre se han registrado dígitos positivos, excepto en 2008, cuando el empleo se mantuvo sin variación. La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos estima que en dos años se han cerrado 80.000 comercios y se han perdido 200.000 empleos.
La cifra
5% es el incremento de la facturación con el que espera cerrar el pequeño y mediano comercio la campaña de rebajas.