El mundo notará los efectos de la crisis durante años, según el Banco Mundial
En una rueda de prensa en Berlín, Zoellick se ha centrado en las economías más débiles y ha señalado que las previsiones del Banco Mundial estiman que, como consecuencia de la crisis, 64 millones de personas caerán en la pobreza entre 2009 y 2010.
"Para los países desarrollados, es una cuestión de puestos de trabajo y crecimiento económico. Para muchos países pobres, es el dolor lacerante de millones de personas que pasan hambre, se enferman, con el impacto afectando a una generación de niños por muchos años", ha explicado el presidente del Banco Mundial.
Zoellick ha comentado que uno de los sectores clave en la recuperación económica global será el sector privado. "A medida que las medidas de estímulo se desvanecen, vamos a necesitar una mano de la economía privada", ha puntualizado.
Según el presidente del Banco Mundial, los países desarrollados tienen especial interés en ayudar a las economías emergentes a salir de la crisis ya que su empuje puede ser una fuente de crecimiento global.