El nuevo año arranca con fuertes subidas en el precio del transporte
El nivel históricamente bajo en el que culminará la inflación este año permitirá a familias y empresas arrancar 2010 con precios congelados en servicios esenciales como el teléfono, el gas o el agua. En cambio, el transporte permanecerá, un ejercicio más, ajeno a las moderadas expectativas de IPC, con subidas que llegan a superar el 21% en el abono de diez viajes de metro y autobús de Madrid.
La atonía de la actividad económica y los mínimos históricos de los tipos de interés llevan a los analistas a una conclusión unánime: la inflación, que en noviembre se situó en el 0,3%, se mantendrá durante el próximo año en niveles muy bajos. En ese contexto, buena parte de los servicios y productos de tarifa predefinida verán congelado su precio en el próximo año, una circunstancia extraordinaria. Ese es el caso del agua, el teléfono, el gas o los peajes, pero no el del transporte de viajeros. Este capítulo se presenta como la gran excepción en tiempos de austeridad.
Así, el consejo de administración de Renfe anunció ayer que los billetes de los trenes de alta velocidad y los de larga distancia se incrementarán un 4% en 2010, mientras que los de distancias medias lo harán un 5%. Por su parte, los servicios de cercanías, que operan en doce ciudades, se encarecerán un 6%. La compañía justifica el avance, muy superior al del IPC previsto (en el entorno del 1%), por la necesidad de hacer frente a los costes de explotación, puesto que en 2010 va a dejar de contar con financiación estatal.
Pero, sin lugar a dudas, la subida que ha desatado una mayor contestación social es la del billete de diez viajes de metro y autobús de Madrid: desde los 7,4 euros que cuesta en la actualidad, a partir del viernes pasará a costar nueve, lo que supone una subida del 21,6%. De este modo, el billete múltiple, utilizado por la cuarta parte de los usuarios de transporte público de la capital, acumula una subida del 46% en los últimos cuatro años, en los que se ha primado a los viajeros ocasionales al congelar en un euro el precio del billete sencillo. En otras grandes ciudades la evolución del precio del transporte público es más moderada: en Barcelona oscilará entre el 1% y el 2%, según modalidades, mientras que en Valencia se congelarán las tarifas, tanto de autobús como de metro. El precio del servicio de taxi permanecerá inalterado en esas ciudades, al igual que en Sevilla.
El abono de diez viajes de autobús y metro en Madrid se encarece un 21,6%
La factura de la luz se encarece
El Gobierno aprobó el viernes pasado las principales tarifas que dependen de la Administración central. A partir del 1 de enero, la tarifa eléctrica sin discriminación horaria (es decir, la más habitual) aumentará un 2,64%, lo que supone un incremento mensual de 89 céntimos para el consumidor medio. El recibo de la luz acumula así cinco años consecutivos subiendo por encima del IPC. En cambio, las tarifas del gas natural permanecerán invariables, tanto para consumo de los hogares con calefacción, como para los que no la tienen. Para el año que viene, también la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones ha decidido congelar la cuota de abono mensual de Telefónica, que seguirá en los 13,97 euros que cuesta desde el año pasado. La cuota de abono es el único precio final del antiguo monopolio público que todavía está regulado.
La evolución de los precios generales también llevará a la congelación de los peajes de las autopistas estatales: será la primera vez desde que en 2002 se instaurase el actual modelo de gestión en que no se aumente su importe.
2009 concluye con gran disparidad geográfica
A lo largo del año que ahora concluye, las distintas administraciones públicas han decretado importantes subidas de tarifas. La organización de consumidores Facua acaba de publicar un informe con las variaciones más destacadas.Electricidad. La tarifa mayoritaria por kilovatio hora subió un 6,2%, mientras que la cuota fija mensual aumentó un 2,5%. Para un consumidor de hogar medio, el incremento supuso 4,05 euros más (3,32, más el 22% que representan los impuestos sobre electricidad y valor añadido).Gas. Después de registrar máximos históricos el año pasado, el precio de la bombona de butano descendió un 22% este año, 3,07 euros. En cuanto al gas natural, el descenso acumulado para la mayoría de los hogares fue del 27,4% en el kilovatio hora. En cambio, la cuota fija aumentó hasta un 52,3% para la mayoría de los usuarios.Aghua. Las tarifas del suministro domiciliario repuntaron este año una media de entre el 6,4% y el 6,2%, según un estudio realizado en 28 ciudades. Para una familia de cuatro miembros que consume 10 metros cúbicos al mes, la variación de las tarifas llega a alcanzar los 350 euros anuales, según sea la localización geográfica.Transporte urbano. Comparando tarifas de 30 ciudades, Facua calcula la subida media del bonobús en un 8,2%, llegando a oscilar los precios hasta un 163%. El incremento medio del billete sencillo alcanzó el 8,1%, mientras que el del abono mensual fue del 4,1%. En cuanto al servicio de taxi, el aumento medio en 41 ciudades fue del 5,8%, y se observaron diferencias tarifarias de hasta el 169%.
El euríbor tiende a estabilizarse
Al margen de la evolución de las facturas, un determinante crucial del gasto de las familias es el servicio de la deuda hipotecaria. El euríbor, tipo de interés de referencia para la mayoría de los préstamos, ha vivido un año de continuos descensos, en los que ha ido marcando mínimos históricos. Esa tendencia se truncará en diciembre, según todos los indicios: su tasa diaria se situó ayer en el 1,245%, con lo que, muy probablemente, cerrará el mes alrededor del 1,24%, un punto básico más que en noviembre.En cualquier caso, es improbable que se inicie un brusco ciclo alcista del euríbor, a la vista de que la atonía económica de la zona euro descarta subidas importantes de los tipos de interés por parte del BCE.
