El Congreso bendice la nueva financiación autonómica
La nueva financiación autonómica nace coja, pero no tanto como temía el Gobierno. Un error de CiU y PNV en la votación sumó ayer a ambos grupos a la mayoría favorable al proyecto de ley. Ahora comienzan las negociaciones bilaterales con las comunidades y algunas, como la de Madrid, han empezado a ajustar cuentas.
La reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas que ayer avaló el Congreso inyectará en las arcas regionales 11.000 millones añadidos a los presupuestos que ya manejan, el 80% de los cuales irán destinados a cubrir las necesidades de educación, sanidad y servicios sociales. Estos recursos los irá aportando el Ejecutivo central hasta 2012, por lo que ahora se abre la ronda de comisiones bilaterales con las diferentes comunidades.
Si en noviembre, el Gobierno salvó el primer trámite de la reforma gracias a la Unión del Pueblo Navarro, CC, Nafarroa Bai y la abstención del PNV, ayer superó con creces la votación en el pleno debido al despiste de los nacionalistas catalanes y vascos.
Después de sucesivas anécdotas -cambio en el horario de las votaciones, la lentitud de los ascensores, y el olvido en votar algunas enmiendas de la oposición - llegó el error: los diputados de CiU y el PNV, creyendo que votaban enmiendas parciales, respaldaron el texto completo de la reforma, provocando la alegría en el PSOE. Al final, sólo votaron en contra el PP, la diputada Rosa Díez y el BNG.
En opinión del portavoz adjunto de Economía del PP, Álvaro Nadal, el proyecto de ley "nace fracasado" y retrasará la recuperación económica porque "no habrá suficientes recursos para los servicios públicos que más interesan a los ciudadanos". La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, fue la primera en reaccionar a la aprobación del texto. El próximo lunes, ha sido convocada por Economía para participar en la comisión mixta de transferencias y va a aprovechar la ocasión para reclamarle 15.000 millones porque considera que en el nuevo modelo de financiación se sigue sin tener en cuenta el constante crecimiento de población madrileña.
Lo que realmente le interesaba ayer al PNV no era la financiación autonómica que afecta a todas las comunidades menos al País Vasco y a Navarra, sino el blindaje del Concierto Económico que, finalmente, prosperó con los votos de todos los grupos, a excepción del PP y de Rosa Díez. Esta iniciativa impide que las normas fiscales que emanen de las tres diputaciones forales puedan ser recurridas en la jurisdicción ordinaria.
El diputado del PNV Aitor Esteban defendió que ello no supone privilegio sino una equiparación al resto de la normativa fiscal. El PP, que votó a favor de esta reforma en el Parlamento de Vitoria, salió del paso mediante una intervención técnica del diputado Arturo García Tizón, en la que defendió la recuperación del recurso previo ante el Tribunal Constitucional que operó de 1979 a 1985. Ahora, el temor del PNV es que alguna comunidad, como La Rioja, recurra al Constitucional.
De Ley âmnibus de los servicios a ley de los taxistas
Los atascos que provocaron ayer los taxistas con sus concentraciones en los alrededores del Congreso mientras se debatía la denominada Ley âmnibus no influyeron en el ánimo del PSOE, que terminó incluyendo en su texto la nueva regulación de este medio de transporte, contando con el apoyo indirecto de PNV y BNG. El líder del PP, Mariano Rajoy acudió a las puertas del Congreso a entrevistarse con representantes del sector, a los que prometió que seguirá "dando la batalla". Esta ley, que aplica la Directiva de Servicios, permite el alquiler de vehículos con conductor, lo que es considerado por los taxistas como una intromisión. Ayer se sucedieron decenas de concentraciones por todo el país.