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Guerra por las retribuciones

Londres grava un 50% el sueldo variable de 20.000 banqueros

Revuelo en la City. El responsable del Tesoro británico, Alistair Darling, anunció ayer una nueva medida respecto a los salarios de los profesionales del sector financiero por la que se gravará en un 50% los bonus de los banqueros que superen las 25.000 libras (27.700 euros). El impuesto se empezará a aplicar de forma inmediata hasta abril de 2010 y deberá ser abonado por las entidades.

El ministro británico de Economía, Alistair Darling
El ministro británico de Economía, Alistair DarlingREUTERS

La crisis financiera ha generado una importante polémica acerca de la retribución que perciben los empleados de la banca y que sigue dando mucho de que hablar. Reino Unido anunció ayer la puesta en marcha de una medida histórica por la que gravará en un 50% las primas del sector financiero que superen las 25.000 libras (27.700 euros) con el objetivo de que los bancos den prioridad al fortalecimiento de sus ratios de capital en lugar de a las retribuciones de sus altos ejecutivos.

El responsable del Tesoro británico, Alistair Darling, anunció ayer durante la presentación parlamentaria del proyecto presupuestario del Gobierno que se aplicará un impuesto "extraordinario" a aquellas entidades financieras que paguen a sus empleados primas superiores a las 25.000 libras y que deberá ser abonado por las compañías, no por los empleados.

La tasa -que entrará en vigor inmediatamente y durará hasta abril de 2010- está diseñada para hacer frente al descontento por parte de los ciudadanos por los multimillonarios bonus desembolsados por grandes bancos que han sido rescatados con el dinero de los contribuyentes. La aplicación de esta medida logrará una recaudación de unos 500 millones de libras (551 millones de euros), según señaló Darling. "Este dinero adicional se utilizará para pagar las medidas adicionales, ya anunciadas, como la ayuda para los jóvenes y desempleados de más edad para buscar trabajo", añadió el responsable de finanzas británico.

Más información
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El gravamen sobre las bonificaciones se aplicará a todos los bancos, sociedades y sucursales de bancos extranjeros que operan en Gran Bretaña e incluye todos los pagos discrecionales tales como acciones, opciones y los aumentos salariales temporales.

Fuentes del mayor banco español, Santander, que cuenta con una posición relevante en Reino Unido, han señalado que aún es pronto para valorar la repercusión que esta medida tendrá sobre Abbey, su filial británica.

El banco que preside Emilio Botín cuenta con una plantilla de 23.046 en Reino Unido (datos a cierre del tercer trimestre) y la actividad en este territorio generó un 16% del beneficio atribuido en los nueve primeros meses del año.

Fuga de talentos en la City

Entre las reacciones al anuncio realizado por el Gobierno británico, la Asociación de Banca de Reino Unido (BBA por su sigla en inglés) ha considerado que dicha medida restará atractivo a Londres como centro de negocios.

"Visto desde el exterior, Londres podría parecer ahora un lugar mucho menos atractivo para hacer negocios", afirmó la consejera delegada de la asociación, Angela Knight, quien hizo hincapié en que la nueva tasa debe fijarse en el contexto de los compromisos ya alcanzados, ya que los bancos británicos ya aceptaron restricciones en el pago de incentivos más amplios que en el resto de países del G-20.

De este modo, la representante de la patronal bancaria subrayó que "sólo los acuerdos pactados a nivel internacional tendrán éxito a la hora de reformar las remuneraciones del sector financiero".

Los grupos bancarios han advertido, además, que penalizar a personas con salarios altos en el sector financiero dará lugar a un éxodo de talentos extranjeros. Por su parte, el consejero del BCE, Axel Weber, señaló el martes que un impuesto sobre las primas extraordinarias de los banqueros no sería eficaz para fomentar un comportamiento de mayor precaución por parte de los bancos a largo plazo.

La cifra

 

550 millones de euros espera recaudar el Tesoro británico con este impuesto, con el que creará ayudas para que jóvenes y desempleados puedan trabajar.

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