Feijóo pretende una fusión "paritaria" de las cajas gallegas y encarga dos auditorías externas
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunció hoy que proseguirá con su intento de conseguir una "unión por fusión" de Caixa Galicia y Caixanova, pese a que por el momento ambas cajas no han conseguido llegar a un acuerdo, y para ello encargará sendas auditorías externas -'due diligence'- de la situación de estas entidades "para certificar la solvencia económica y financiera" de la operación, que en su opinión es la vía que cumple los requisitos de mantenimiento de la "galleguidad" y la "solvencia".
En una comparecencia pública tras reunirse con los sindicatos, empresarios y la oposición, el máximo mandatario gallego oficializó ante los líderes de PSdeG, Manuel Vázquez, y BNG, Guillerme Vázquez, la apuesta de su Gobierno: una fusión "equilibrada, igualitaria y paritaria" entre ambas cajas, así como "responsable", condición que, subrayó, quedará preservada "garantizando la solvencia a través de las auditorías externas".
A mayores, concretó que este documento es un requisito "inexcusable" impuesto por la legislación bancaria previo a cualquier proceso de unión entre entidades. La elaboración de ambos análisis fue comunicada esta mañana por la Consellería de Facenda al director general de Caixa Galicia, José Luis Méndez, y al de Caixanova, José Luis Pego, que -según avanzó Feijóo- expresaron "su acuerdo".
Con todo, el presidente gallego se mostró convencido de que la "integración conjunta" de ambas entidades a través de una fusión es un proyecto "viable" desde una perspectiva "técnica, económica y financiera". Por ello, apuntó que debe ser "un objetivo común y compartido" de las partes implicadas, a las que demandó "voluntad de acuerdo e identificación", pese a que el consejo de administración de Caixanova ratificó la semana pasada su rechazo a una fusión con Caixa Galicia, para la cual esta es la opción prioritaria.
En todo caso, Núñez Feijóo defendió con firmeza la fusión sin ocultar que aspira a "blindar" una alternativa que, a su juicio, supone "los mejores niveles de solvencia a medio y largo plazo" para las cajas. æpermil;sta es también la apuesta del BNG y de los sindicatos que, recordó, la apoyan porque crea "los menores niveles de incertidumbre" entre los trabajadores.
Derecho a veto
"No habría que recurrir a despidos, sería suficiente con jubilaciones anticipadas pactadas", argumentó Feijóo y añadió que también los empresarios están a favor de la fusión porque es la alternativa "más duradera dentro del marco de temporalidad del mapa financiero español". "Y sólo responde a un interés: Galicia", apostilló.
En este contexto, recordó que la Xunta tiene la tutela financiera de Caixa Galicia y Caixanova y avanzó que ejercerá su derecho al veto de cualquier fusión o sistema de protección institucional (SIP) con entidades foráneas por el mandato parlamentario que le obliga a garantizar la galleguidad de las cajas de ahorro gallegas, es decir que sus centros de decisión permanezcan en Galicia.
Opciones desestimadas
Precisamente, Alberto Núñez Feijóo subrayó que, en el proceso de elaboración de su propuesta, el Gobierno gallego desestimó fusiones con cajas de fuera de la comunidad porque no garantizarían el principio de "galleguidad" que, junto a la "solvencia", suponen los dos pilares en los que sustenta su decisión y que fueron respaldados de forma unánime por los tres grupos parlamentarios.
Según explicó, la Xunta desestimó también un SIP con entidades foráneas, una vía explorada por Caixanova y que Caixa Galicia guarda como su "plan B", al considerar que mermaría "sustancialmente" la necesidad de "autonomía" de las cajas gallegas. El máximo mandatario gallego ni siquiera mencionó en su intervención la propuesta del PSdeG de impulsar un SIP interno entre Caixa Galicia y Caixanova.
Trabajo "riguroso"
En su comparecencia -donde le respaldaron con su presencia el conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, y Facenda, Marta Fernández Currás-, el jefe del Ejecutivo autonómico reivindicó el trabajo "riguroso, responsable y prudente" de la Xunta y recordó que ha cumplido el "compromiso" de poner en común sus análisis con agentes económicos, sociales y políticos".
Lo hizo tras mantener una última ronda de contactos con los representantes de los tres colectivos, que se prolongó desde las 10.00 a las 12.45 horas, aproximadamente. De las tres reuniones, la de mayor duración fue la que mantuvo con los dos líderes de la oposición, que se prolongó durante más de una hora. Al salir de este encuentro, Feijóo compareció ante los medios, acompañado de Guillerme Vázquez y Manuel Vázquez, que intervinieron, en este orden, tras el presidente.
"En este tiempo también hemos hablado con las cajas, emplazándolas a establecer un escenario de objetividad y confluencia para mantener los compromisos de galleguidad y solvencia", incidió Feijóo en su intervención y señaló que "no ha sido posible" que ambas presenten "una única estrategia, informe y voluntad". "Pero la Xunta tiene la obligación de pronunciarse y nuestra posición es clara: apostamos por proseguir en el camino de una fusión paritaria", concluyó.