Los 27 acuerdan ceder datos bancarios a EE UU para investigaciones antiterroristas
Los ministros del Interior de la UE aprobaron hoy un acuerdo temporal de nueve meses de duración que permitirá a EE UU mantener el acceso a los datos financieros de Swift, un consorcio bancario basado en Bruselas que supervisa las transferencias internacionales, para investigaciones antiterroristas.
El acuerdo fue posible gracias a la abstención de Alemania, Austria y Hungría, que hasta ahora mantenían reservas sobre el texto porque querían más garantías de protección de los datos personales, según informaron fuentes diplomáticas.
El responsable de Terrorismo e Inteligencia del Departamento del Tesoro de EE UU, Stuart Levey, se felicitó del acuerdo alcanzado por la UE pero reclamó la rápida conclusión de un pacto definitivo. Aseguró que este programa ha proporcionado "pistas de gran valor" que han permitido "frustrar ataques terroristas mortíferos en todo el mundo", respetando al mismo tiempo "los estándares más altos en materia de protección de datos".
Al aprobar el acuerdo, los ministros del Interior desoyeron la petición del Parlamento Europeo, que el pasado jueves reclamó que se retrasase la decisión hasta después de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, este martes 1 de diciembre, que le da poder en estas negociaciones. Los eurodiputados piden más salvaguardas para proteger los datos de los ciudadanos europeos.
El Ejecutivo comunitario aseguró que el nuevo acuerdo contiene garantías adicionales sobre el que ya está en vigor actualmente, como una cláusula que permite a la UE suspenderlo si no está conforme con cómo lo aplica EEUU. Además, la decisión de autorizar las transferencias de datos al departamento del Tesoro estadounidense será adoptada por una autoridad judicial europea, que debe verificar la legalidad de la petición.
Asimismo, el acuerdo obliga a las autoridades estadounidenses a compartir con la UE aquella información que obtengan y que pueda beneficiar a la lucha contra el terrorismo en Europa. Queda prohibido usar los datos para cualquier otra cosa que no sea la lucha antiterrorista, y las informaciones que se recojan deberán borrarse al cabo de cinco años.
En la actualidad, ya existe un acuerdo entre la UE y EEUU que permite a los americanos acceder a los datos de Swift y contempla una serie de salvaguardas en materia de protección de datos. Se firmó en 2007 tras descubrirse que la administración estadounidense había estado espiando sin ningún control las transacciones de Swift desde los atentados de Nueva York y Washington en 2001.
Pero ahora, Swift ha decidido repatriar a la UE el servidor que tenía en EEUU, y desde el que la administración estadounidense accedía a los datos bancarios, para proteger mejor los datos de sus clientes. Para que EEUU siga pudiendo acceder a los datos que se encuentran en territorio europeo, en Bélgica y en Países Bajos, necesita firmar un nuevo acuerdo con la UE.
El nuevo acuerdo durará 9 meses para dar tiempo a negociar un pacto definitivo con EE UU en el que esté plenamente implicada la Eurocámara. La Comisión defiende este nuevo acuerdo alegando que ha sido en el pasado una importante y eficaz herramienta para luchar contra la financiación del terrorismo y evitar ataques terroristas y que sería peligroso detener la vigilancia de esta información.
Los datos obtenidos gracias a este pacto contribuyeron a investigaciones como la de la trama que pretendía hacer estallar aviones en pleno vuelo entre Reino Unido y Estados Unidos en 2006, según la Comisión.