España no puede aplazar las reformas
En España hay aún tantos pesimistas que podrían llenar los numerosos bares del país. Pero los economistas de Citigroup y Merrill Lynch predicen ahora que el PIB español empezará a crecer este trimestre, más tarde que el resto de la eurozona pero antes de lo previsto por el Gobierno en sus cálculos presupuestarios.
Esta recuperación no será consecuencia directa de los consumidores. De hecho, los propietarios españoles de viviendas tienen uno de los niveles de deuda más altos y el consumo privado lleva cayendo siete trimestres consecutivos. El desempleo, que apunta ya al 20%, sigue siendo un gran problema. Es más, los esfuerzos del Gobierno para reducir el déficit fiscal, que alcanzará este año el 10%, segarán el próximo año cerca de un 1% del PIB, según datos de Goldman Sachs.
Pero puede que los consumidores del resto de Europa saquen a España de la recesión. Las exportaciones, incluyendo los ingresos del turismo extranjero, suponen el 30% del PIB español, y cerca del 70% de esta cifra proviene de vecinos europeos. Las playas y los hoteles españoles parecen un poco más llenos. Asimismo, el alto incremento del paro ha hecho que crezca la productividad de los que trabajan. Y la débil inflación debería mantener por el momento los salarios bajos.
Con todo, que España pueda salir de la recesión antes de lo previsto no significa que el crecimiento vaya a ser rápido. Al contrario: los optimistas esperan un crecimiento insignificante y una tasa de desempleo persistente en el futuro próximo.
Dado que Madrid no puede devaluar su moneda, es vital lograr unos costes laborales competitivos. El Gobierno ha admitido finalmente que la legislación laboral española tiene que ser modificada. Se habla de ir hacia el "modelo alemán", en el que los empleados pueden trabajar a tiempo parcial y recibir subsidios del Estado. Eso no bastaría. El Gobierno debe en primer lugar abaratar a las empresas el alquiler de mano de obra.
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero está preparando una Ley de la Economía Sostenible diseñada para sacar al país de la crisis, incluyendo medidas para promover la inversión en renovables y en alta tecnología. Suena bien, pero una reforma laboral concreta y sustancial sería mucho más útil.
Por Fiona Maharg-Bravo