Cadbury gana atractivo al sumarse Hershey y Nestlé a la puja de Kraft
Semanas después del lanzamiento de una oferta de compra por parte de Kraft, empresas de alimentación de todo el mundo estudian a la británica Cadbury con interés. Hershey, Nestlé y quizá Ferrero podrían plantar cara a la oferta de la empresa americana.
Las acciones de Cadbury experimentaron ayer un alza significativa. La razón es que los inversores tienen en sus carteras los títulos de una empresa a la que no le dejan de salir potenciales compradores. Por ahora, sólo la estadounidense Kraft ha hecho una oferta de compra, de 16.700 millones de dólares (unos 11.150 millones de euros), pero desde el fin de semana hay otras compañías que han expresado interés en la británica y que podrían forzar a Kraft a elevar su precio.
Por un lado, el especialista del chocolate Hershey, que podría lanzar una propuesta en solitario o con la italiana Ferrero por valor de 17.000 millones de dólares, y por otro, el gigante Nestlé.
Cadbury ha reiterado que prefiere mantener la independencia y no aceptar ninguna proposición. No obstante, su presidente, Roger Carr, ha señalado este fin de semana al rotativo Sunday Telegraph que llegado el momento podría considerar una oferta interesante "por parte de una empresa seria". En este sentido, el responsable de la compañía ha especificado que aunque se sentiría más cómodo con una propuesta "en línea con nuestro modelo de negocio, la prioridad es el valor de la oferta" y no quien la proponga.
Problemas en Pensilvania
Hershey, la empresa chocolatera de Pensilvania, ya contempló hace dos años la posibilidad de una unión que no prosperó. Ahora, su mayor accionista, un fondo fideicomisario que supervisa obras sociales y de educación, está repensándose su aversión a las compras y ha vuelto a plantearse la adquisición de la británica.
La oferta de Hershey sería complicada porque la empresa no tiene capacidad financiera suficiente para endeudarse sin crearse problemas. Los bancos que le asesoran creen que podría perder su calificación crediticia si tomara mucha deuda para hacer una propuesta más atractiva que la de Kraft al proponer que una parte mayor del pago fuera en dinero y no acciones.
La otra empresa que podría competir por Cadbury es la suiza Nestlé que está analizando sus opciones. Para Nestlé los problemas no serían financieros sino los que les puedan plantear las autoridades de la competencia, sobre todo en Reino Unido.
Hershey, un gigante con una misión social
Hershey fue fundada hace más de 100 años por Milton Hershey en la localidad de Pensilvania que lleva su nombre porque fue él quien, en esencia, puso sus cimientos. El empresario estaba convencido de que las empresas tenían la obligación de compartir su patrimonio con la sociedad y actuó en consecuencia. Una de sus obras sociales fue la creación de un colegio para huérfanos que estaba administrado por un fondo fideicomisario al que legó después su fortuna y la propiedad de la empresa.Es ese fondo, poco amigo de las grandes operaciones empresariales, el que tiene la llave de lo que ocurre en Hershey. En 2002 se negoció una unión con Wrigley que se malogró en el último minuto y que levantó tanta polvareda política que intervino el Gobierno de Pensilvania. A resultas de ello, el fiscal general de este Estado tiene que aprobar las operaciones que puedan poner en peligro el control accionarial y se limitan las emisiones para financiar compras.