Ordóñez urge a la banca a adoptar los nuevos criterios de remuneración
El Banco de España remitió el 11 de noviembre una carta al sector financiero en la que le pide "la adopción de los estándares FSB -los nuevos criterios de remuneración y gobierno corporativo- antes del 31 de diciembre". Un año antes de lo previsto por la UE. La banca cree que el ajuste en España será "mínimo".
La institución que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez no sólo no quiere sorpresas, sino que también pretende adelantarse en el cumplimiento de ciertas normas internacionales, como son las nuevas exigencias en materia de remuneración de los consejeros y directivos de las entidades financieras españolas. El supervisor nacional siempre se ha distinguido por ser uno de los bancos centrales más conservadores y prudentes del mundo, y parece que quiere seguir manteniendo esta fama.
Eso es al menos lo que se desprende de la nueva carta que ha remitido a bancos y cajas, y que adelanta en un año la aplicación de los nuevos estándares sobre buenas prácticas en materia de remuneración y gobierno corporativo, denominadas internacionalmente FSB Principles for Sound Compensation Practices. Implementation Standards -estándares FSB-.
En algo menos de tres meses y medio el Banco de España ha remitido, a través de sus asociaciones patronales, dos cartas firmadas por el director general de Regulación, José María Roldán. La primera está fechada el pasado 31 de julio y la segunda el día 11 de noviembre. En ambas misivas Roldán reclama a las entidades que realicen antes del cierre del presente ejercicio una "autoevaluación" de las prácticas retributivas de sus cúpulas.
La banca española cree que el cambio en su política retributiva será mínimo
Sus conclusiones, que deberán ser aprobadas por los respectivos comités de remuneración de cada entidad financiera y por sus consejos, se remitirán en las próximas semanas al Banco de España. Una vez analizados estos informes y los cambios previsto que realizarán tras aplicar los nuevos estándares, la institución supervisora hará las recomendaciones precisas a cada entidad.
La novedad de la segunda carta, que llegó a la banca el pasado jueves, es que Ordóñez pretende acelerar la aplicación de los nuevos requisitos por los que se tiene que regir la remuneración de los directivos bancarios. Así, frente a la primera misiva, que pedía que se aplicarán antes de diciembre de 2009 sólo los principios generales internacionales, ahora exige la adopción de los estándares (desarrollos), según consta en el documento aprobado el pasado 25 de septiembre por los ministros de Finanzas y gobernadores del G-20 en Pittsburgh (EE UU).
Los estándares FSB "establecen importantes directrices que deben ser aplicadas de forma rigurosa, consistente e inmediata por las entidades financieras relevantes en todo el mundo (...). Indica qué áreas, y de qué forma, deben ser abordadas prioritariamente por las entidades y los supervisores en aras de conseguir una implementación global efectiva y consistente de dichos principios", resume la carta de Roldán. Los bancos españoles consideran que los cambios que deberán hacer en su política de retribuciones serán "mínimos". Añaden que a priori el supervisor opina lo mismo.
Transposición en los países de la CE para el próximo ejercicio
El Banco de España afirma que la Comisión Europea, dentro de su proyecto de modificar la Directiva 2006/48, ha decidido incluir casi "íntegramente las disposiciones de los estándares FSB en la propuesta que estaba siendo considerada por el Parlamento Europeo y el consejo de ministros en estos momentos y que, una vez aprobada, ser traspuesta en los estados miembros antes de 31 de diciembre de 2010". Ante ello, Roldán asegura que "en aras de avanzar en orden al cumplimiento de la normativa en materia de remuneración, espera de las entidades de crédito españolas la adopción de los estándares FSB antes de 31 de diciembre de 2009". La misiva explicativa de la AEB, de un párrafo avisa a sus asociados que estas normas "serán de obligada adopción" antes del cierre de este año.
Unas reglas más dirigidas a los bancos de inversión
Tanto los expertos como las entidades financieras españolas consideran que los nuevos estándares por los que se tiene que regir a partir de ahora la política de remuneraciones internacional afecta principalmente a los bancos de inversión, que buscaban retribuciones multimillonarias a través de los bonus a corto plazo, con la consiguiente exposición al riesgo de estas instituciones. Esta es una de las principales causas de la crisis financiera que tiene su origen en agosto de 2007. Los bancos españoles más conservadores y con actividades de banca comercial han vinculado siempre estos bonus a plazos de tres años a sus beneficios, explican. Pese a ello, Santander asegura que está revisando su política de retribuciones, mientras que BBVA cree que no tendrá que realizar cambios.