Austeridad, incentivos fiscales a la inversión y flexibilidad laboral
Empresarios españoles de referencia piden un pacto de Estado anticrisis.
Si José Luis Rodríguez Zapatero hubiera asistido ayer al XII Congreso del Instituto de la Empresa Familiar celebrado en Zaragoza hubiera salido despeinado -la capital aragonesa sufrió ayer vientos huracanados- y con una maleta llena de recetas anticrisis. Empresarios reconocidos como Simón Pedro Barceló (Grupo Barceló), José Manuel Entrecanales (Acciona), Isak Andic (Mango) o Juan Roig (Mercadona) reclamaron ayer que el Gobierno, tal y como hacen ellos en sus respectivas empresas, se apriete el cinturón y apueste por la austeridad. Además, propusieron mayores incentivos fiscales a la reinversión -"sin ella no se crean empleos"- y acabar con la "excesiva" rigidez laboral.
"Es el momento de recordar a todos los partidos políticos que en gastar más no hay ningún mérito. Lo verdaderamente difícil, como saben ciudadanos, familias y empresas, es gastar lo justo y bien", aseguró Simón Pedro Barceló, presidente del Instituto de Empresa Familiar.
José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona -que a pesar de su tamaño no deja de ser una empresa familiar- apuntó que "el Gobierno está haciendo poco uso" de la política fiscal y exigió mayores incentivos fiscales para las inversiones que se realicen en 2010, un año que será especialmente difícil. El presidente de Mango, Isak Andic, fue un paso más allá y reclamó la exención total de los beneficios que se destinen a la reinversión. Actualmente, ya existe una deducción que permite que las partidas destinadas a reinversión tributen al 18% en lugar del tipo general del impuesto de sociedades, del 30%.
Andic, además, pidió flexibilizar el mercado laboral y puso como ejemplo el modelo suizo. De tal forma que, de aplicarse en España, los empleados trabajarían más o menos horas según la situación y necesidades productivas de la empresa. Barceló, como presidente del Instituto de Empresa Familiar, también denunció la rigidez del mercado laboral, "que es un problema que va mucho más allá de las indemnizaciones por despido".
Barceló no desaprovechó la ocasión para denunciar los actuales casos de corrupción política que "están paralizando el funcionamiento de algunas Administraciones y creando un clima de desconfianza que ralentizará la inversión". La decepción del mundo empresarial hacia la clase política quedó patente en la encuesta realizada por la organización a los 400 empresarios que asistieron al Congreso en la que puntuaron, en una escala de 1 a 9, con un 1,18 a la clase política. Se trata del peor resultado desde que se inició esta encuesta en 2006. "Exigimos que la política vuelva a los valores en los que creemos los ciudadanos", clamó Barceló. El presidente del Instituto de la Empresa Familiar demandó un gran "pacto de Estado para salir de la crisis".
Entre los grandes problemas que aquejan a la economía española, los empresarios, además del paro, apuntaron la baja productividad. Juan Roig, presidente de Mercadona, fue el más crítico. "El Gobierno no habla de incrementar la productividad y ese es el principal problema", denunció.
Con todo, Carlos Mas, presidente de PricewaterhouseCoopers, lanzó un mensaje más optimista y recordó que tras la anterior crisis, la del 92, empresas familiares españolas como Ferrovial, Mango, Acciona o Iberostar, entre otras, lograron convertirse en marcas de referencia mundial. "Hay que convertir la crisis en oportunidad", apuntó. La manida frase -que no por ajada deja de tener un punto de verdad- no podía faltar en un congreso de empresas.
Alegato a favor de la figura del empresario
El presidente del Instituto de Empresa Familiar, Simón Pedro Barceló, lamentó los estereotipos negativos que acompañan al empresario, que aparece como el gran culpable cuando las cosas van mal y que, sin embargo, no se reconoce su labor cuando la economía nacional crece. "Hemos creado [los empresarios] siete millones de puestos de trabajo desde 1992", recordó el máximo responsable del Grupo Barceló; lo que ha permitió "reducir el déficit público y entrar en el euro".