El Gobierno no aceptará más despidos en Figueruelas que los pactados con Magna
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, ha asegurado hoy que el acuerdo que se había alcanzado con Magna sobre la planta de General Motors (GM) en Figueruelas (Zaragoza) es de mínimos. De este modo, ha dicho que no aceptará que General Motors plantee más recortes de empleo en Figueruelas que los pactados con Magna, después de que la multinacional estadoundiense diera marcha atrás a sus planes para vender Opel al fabricante de componentes canadiense.
Sebastián ha asegurado que la decisión de GM "nadie se la esperaba" y que el Gobierno ha recibido la noticia "con sorpresa". "Volvemos a estar donde estábamos bajo el paraguas de General Motors". Le he transmitido al director financiero de GM que "esto no supone que volvamos a la casilla de salida". El titular de Industria ha hecho estas declaraciones en el marco de su visita a la fábrica de Airbus en Illescas (Toledo).
Sebastián, se reunirá esta tarde, a partir de las 17.30 horas, con la comisión permanente del comité de empresa de Opel en Figueruelas (Zaragoza) para analizar la decisión de General Motors de no vender Opel a Magna.
Asimismo, el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, expresó hoy su deseo de que la decisión de General Motors de revocar la venta de Opel a Magna no ponga en riesgo los acuerdos alcanzados que garantizaban la viabilidad de la planta de Figueruelas, "con los ajustes que se habían acordado".
"Confiemos en que la nueva situación no impida ese hecho", indicó Corbacho en declaraciones a Cuatro recogidas por Europa Press. En cualquier caso, anunció que el Gobierno trabajará con el Ejecutivo aragonés, con los sindicatos y con otros países europeos tras el nuevo escenario.
UGT pide que el acuerdo con Magna sea "base mínima" para otro pacto
Por su parte, la Federación de Metal, Construcción y Afines de UGT (MCA-UGT) aseguró hoy que defenderá que el acuerdo que la planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza) alcanzó con Magna sirva de "base mínima" para un posterior convenio con General Motors (GM) relativo a esta fábrica.
El sindicato solicitó además a la multinacional que proporcione a los representantes de los trabajadores información acerca de su decisión y las posibles repercusiones de la misma sobre el futuro de la planta zaragozana y sus puestos de trabajo.
En este sentido, UGT mostró su esperanza de que GM "mantenga como hasta ahora su confianza" en la fábrica española de Opel. Según recordó, que el grupo "siempre ha beneficiado a Figueruelas con sus decisiones al tener en cuenta que es la más eficiente y competitiva del grupo en Europa".
No obstante, la organización sindical "exigió" prudencia a todas las partes implicadas hasta que se conozcan las razones y las repercusiones de la decisión de GM de finalmente no vender Opel a Magna. `