La CNMV pide al mercado inmobiliario que contabilice el deterioro de sus activos
El vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Fernando Restoy, pidió hoy a las empresas inmobiliarias, auditores y sociedades de valoración que contabilicen el deterioro de los activos inmobiliarios provocado por la crisis económica.
"Teniendo en cuenta las condiciones del mercado inmobiliario, se considera prioritario que las empresas inmobiliarias, sus auditores y las sociedades de valoración lleven a cabo estimaciones rigurosas del deterioro de sus activos", afirmó Restoy durante su intervención en el IV Congreso de Atasa.
El vicepresidente de la CNMV pidió a los agentes del sector que calculen "adecuadamente" los valores netos de realización o sus valores en uso, dependiendo de si se trata de existencias o inversiones inmobiliarias.
Restoy explicó que la crisis financiera ha puesto de relieve las limitaciones prácticas del concepto de valor razonable como criterio único o básico de medición, y que la ausencia de liquidez ha resultado "un inconveniente" para adecuar la medición del criterio de valor razonable. Esta situación "puede llegar a dañar la capacidad para representar adecuadamente la realidad económica de una empresa", apuntó Restoy.
En este sentido, el vicepresidente de la CNMV recomendó seguir aplicando el marco normativo compuesto por las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), que debe realizarse al mínimo entre el coste y el valor neto de realización (VNR).
Por ello, Restoy explicó que los informes de valoración de inmuebles deberían indicar si existe diferencia entre el valor neto de realización y el valor razonable, así como explicar las circunstancias específicas de la entidad que el valorador ha tenido en cuenta.
Dada la situación de crisis económica, el vicepresidente de la CNMV apostó por reforzar el modelo mixto de las normas contables y de medición y destacó el refuerzo del organismo supervisor en el seguimiento de las prácticas de valoración.
Restoy recordó que en julio de 2008 la CNMV recomendó contar con sociedades y expertos independientes para realizar valoraciones adecuadas que eviten conflictos de interés.
Para ello, el vicepresidente de la CNMV aconsejó que las sociedades de valoración cuenten con un código interno de conducta y establezcan las llamadas 'murallas chinas' entre las áreas de valoración e intermediación.
Restoy también recomendó que la fijación de tarifas sea independiente de la valoración otorgada al inmueble y que los valoradores cuentes con formación continuada.