Ebro sondea realizar una oferta por la división europea de arroz de Sos
Ebro Puleva está interesada en la división arrocera de Sos, pero no en todo el negocio. En concreto, sólo en su división europea, según adelantan bancos con los que habitualmente trabaja el grupo de alimentación. El precio de división podría rondar entre los 100 y los 130 millones de euros.
Ya había trascendido su interés si llegaba el día en el que Sos se decantara por poner a la venta su división arrocera. Pero los planes de Ebro Puleva pueden estar lejos de los deseos de su competidor español.
El grupo de alimentación podría estar interesado en hacerse con el control de la división arrocera, aunque, posiblemente sólo de una parte de ésta. En concreto, fuentes de entidades financieras con las que habitualmente trabaja Ebro Puleva aseguran que la compañía presidida por Antonio Hernández Callejas estaría más dispuesta a hacerse con el negocio europeo. La razón: la implantación de Ebro en Estados Unidos hace que los negocios de Sos en ese país no sean tan atractivos.
Sos controla en EE UU American Rice, que adquirió en 2004 y aporta unos ingresos anuales cercanos a los 208 millones de euros.
Sin embargo, Ebro prefiere ni confirmar ni desmentir su interés por el arroz de Sos. De hecho, Ebro respondió hace unas semanas a los últimos rumores asegurando, vía CNMV, que por el momento no había iniciado ningún procedimiento de negociación formal. Tampoco había puesto en marcha los trámites para poner en marcha un acuerdo de confidencialidad.
Además, por el momento, existen grandes dudas respecto al precio que tendría en el mercado el negocio arrocero de Sos. Fuentes del sector cifran el precio a una horquilla situada entre los 100 y los 130 millones de euros. Sin embargo, las intenciones de Sos podrían ser más ambiciosas. Si el grupo pretende hacer efectivo sus planes de reducción de deuda desde los más de 1.000 millones que alcanza actualmente hasta los 600 o 650, las desinversiones tienen que superar los 200 millones. No en vano, la ampliación de capital que Sos planea poner en marcha tiene un suelo de 200 millones de euros. Por ello, en última instancia, ésta ampliación tendría que ser sustancialmente mayor.
Si Ebro se desmarca finalmente de la compra de todo el negocio de arroz, no tendrían por qué faltar candidatos para hacerse con la actividad estadounidense. En concreto, las principales novias podrían ser dos multinacionales norteamericanas, Mars y Pepsico, ya que ambas poseen dos de las marcas más representativas del sector, como son Uncle Bens y Rice-A-Roni, respectivamente. Sin embargo, por el momento, ninguna de las dos reconoce su interés. Es decir, si Sos prefiere vender el negocio del arroz sin trocearlo, los posibles compradores podrían proceder de Italia, ya que los principales operadores no están presentes en el mercado español, por lo que Sos podría ser su puerta de entrada.
En cuanto a los motivos por los que Ebro descarta pujar por la división estadounidense está la fuerte posición de su filial Riviana que, en algunos segmentos controla más del 30% del mercado.
Reducir empleo en semanas alternas
Muchos son los frentes abiertos en Sos. Y uno de ellos es el laboral. Desde hace semanas los sindicatos advierten de las intenciones de Sos de poner en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal. Con él, la compañía tratará de hacer frente a su exceso de producción, especialmente en su división aceitera, y reducir sus costes de fabricación. En concreto, el ERE -que aún debe negociarse con los sindicatos- tendrá una duración máxima de seis meses. æpermil;ste se aplicará, según fuentes sindicales, en semanas alternas a lo largo del próximo año. Aunque las negociaciones con los sindicatos aún están en su fase inicial, el grupo de alimentación ya ha mantenido los primeros contactos con los comités de empresa de las plantas de Carbonell, en Córdoba, y de Koipe, en Andújar (Jaén). Según los sindicatos, Sos pretende analizar "una a una" la situación de cada planta, por lo que algunas podrían esquivar el ERE. Por el momento, Sos no ha desvelado el número de trabajadores que podrían verse afectados.