Los nacionalistas vascos y canarios blindan los Presupuestos de 2010
Todos los grupos con representación parlamentaria se retrataron este viernes por anticipado en el debate sobre los Presupuestos del año que viene. El Gobierno los sacará adelante gracias al apoyo del PNV y de Coalición Canaria, blindaje suficiente para derrotar las seis enmiendas a la totalidad que el martes defenderán el PP y los grupos de izquierda.
Varias sesiones de trabajo celebradas a varias bandas entre el Gobierno y el PNV desde el pasado septiembre dieron este viernes como resultado un acuerdo presupuestario muy compacto con posibilidades de ampliarse al resto de las normas de contenido económico en lo que resta de legislatura.
El pacto con el PNV compromete al Gobierno a culminar antes de fin de año el blindaje del Concierto económico vasco, que cerrará la puerta a los recursos contra las normas forales ante la jurisdicción ordinaria. Era una vieja aspiración del nacionalismo vasco que, finalmente, consigue hacer realidad después de que los socialistas la rechazaran anteriormente en, al menos, cuatro ocasiones.
El acuerdo con el PNV incluye también el pago a la Diputación de Álava de alrededor de 450 millones de euros correspondientes al IVA de los coches importados durante el período 1990-2005. Se realizará antes del próximo verano si el Tribunal Constitucional no dice lo contrario, ya que hay un recurso pendiente de resolución.
El acuerdo implica también el voto favorable de los socialistas vascos a los presupuestos de las tres diputaciones forales, todas ellas gobernadas por el PNV y, posiblemente, la renuncia del PSE a promover una moción de censura conjunta con el PP en la de Álava.
Deducción de 400 euros
Con los seis votos que aporta el PNV, el PSOE se hubiera quedado a uno solo de la mayoría absoluta. Por esta razón, ha negociado en las últimas semanas los dos de Coalición Canaria, bien amarrados desde que el Consejo de Ministros aprobó destinar a las islas inversiones por importe de 25.000 millones de euros en la próxima década. 10.000 de ellos se canalizarán en cuatro años.
El acuerdo con Coalición Canaria se ha remozado también a última hora con la promesa de dotar con 15 millones de euros más la atención a los menores inmigrantes. Se han sumado otras partidas para infraestructuras ferroviarias y planes de empleo por importe de 30 millones.
El blindaje a los Presupuestos conseguido con el apoyo del PNV y de CC al proyecto de ley, evitará al Gobierno tener que ceder a las pretensiones planteadas por los grupos de izquierda de dar una vuelta de tuerca a la reforma fiscal. ERC, IU-IC y el BNG han puesto estas semanas sobre la mesa la necesidad de subir el tipo marginal máximo del IRPF, de elevar la tributación de las Sicav y de introducir progresividad en el llamado cheque-bebé y en la deducción de 400 euros incorporada. El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, negó que haya planteado elevar el IRPF a las rentas altas. En cambio el portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Alonso, reconoció que ofreció mantener la deducción de 400 euros a las rentas inferiores a 11.000 euros y hacerla progresiva hasta los 15.000 euros.
Montoro: "Son las cuentas del déficit y el paro"
Los Presupuestos del "déficit y del paro". Así los bautizó el viernes en el Congreso el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, quien criticó al PNV y a Coalición Canaria por convertirse en "cómplices del desastre".El PP defenderá el próximo martes su enmienda a la totalidad de los Presupuestos en la misma sesión en la que los grupos de izquierda harán lo propio. Montoro afirmó que tanto el PNV como CC serán corresponsables "de la política que genera más paro en toda Europa". A su juicio, "el PNV sólo busca tener una excusa para apoyar al Gobierno socialista, tratando de abrir una brecha en el País Vasco" y ver "si le dejan un hueco de poder".El portavoz de Iniciativa por Cataluña, Joan Herrera, justificó su enmienda de totalidad a partir de la negativa del Gobierno a dar un giro a su reforma fiscal. Herrera explicó que sus peticiones de subir los impuestos a las rentas más altas han sido desoídas por el Ejecutivo, al igual que sus iniciativas para introducir la denominada "fiscalidad verde".