La Ley de Puertos supera el primer escollo en el Congreso
El proyecto de ley que reforma la Ley de Puertos del Estado superó ayer el primer escollo en el Congreso. El PSOE y el PP sumaron sus votos para derribar las dos enmiendas de totalidad defendidas por CiU y ERC-IU-ICV, que recibieron el apoyo del PNV y el BNG. El ministro de Fomento, José Blanco, calificó la tramitación del proyecto de ley como la gran "oportunidad" para convertir a España en "pieza clave" del transporte marítimo a nivel internacional.
Blanco defendió que el sistema portuario español es un "instrumento determinante" de la economía española, dado que mueve el 85% de las importaciones y un 50% de las exportaciones. Además, subrayó que se trata de infraestructuras básicas de interés general que deben ser tratadas con "visión de Estado", ya que su actividad está ligada "íntimamente" al funcionamiento de los mercados "de su área de influencia y de la economía nacional".
Por ello, defendió el ministro, es necesario dotarles de un régimen económico "común, pero flexible" en la prestación de servicios que permitirá "corregir" mediante inversiones las "disfunciones" que existen, atendiendo la "singularidad" de cada puerto y garantizando su "autosuficiencia" económica, al tiempo que incentiva su competencia.
Blanco subrayó que la norma reconocerá la situación ultraperiférica de Canarias y la situación especial de Baleares, Ceuta y Melilla. "Debemos ahora proporcionar al sistema portuario español el modelo estable y definitivo que se merece", señaló el ministro.
Intervencionismo
La nueva Ley de Puertos conduce a un "excesivo intervencionismo" del Estado y a una "escasa disposición al diálogo" que complicará los trámites e incrementará las cargas administrativas, según la lectura que hizo ayer el grupo parlamentario de CiU.