El Tribunal de Cuentas cuestiona la privatización de Red Eléctrica
El Tribunal de Cuentas cuestiona el papel de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en el proceso de privatización de Red Eléctrica (REE), según se desprende del informe aprobado por el pleno del fiscalizador público el pasado 29 de septiembre.
En concreto, el tribunal pone en duda la actuación del holding público a la hora de liquidar los contratos que firmó con Endesa e Iberdrola en 1998 para la compra del grueso de las participaciones que las eléctricas mantenían en REE. Según el informe, en contra de lo que figuraba en los contratos, la SEPI renunció a cobrar los dividendos que le correspondían por su participación en REE en favor de Endesa e Iberdrola. En concreto, la SEPI tendría que haberse quedado con 25,5 millones de los 628,05 millones de euros que abonó a las compañías por una participación del 59% en Red Eléctrica.
Según denuncia el órgano fiscalizador, en la práctica la SEPI actuó como un "puro gestor" e intermediario en la operación. Esto contradice la propia finalidad del holding público, centrada en la búsqueda "de la mayor rentabilidad de sus acciones y participaciones". El presidente de la SEPI en el momento en que se llevó a cabo esta operación era Pedro Ferreras.
En otro informe del tribunal, también del 29 de septiembre, sobre las aplicaciones de recursos realizadas por la SEPI entre 2001 y 2004, con Ignacio Ruiz-Jarabo al frente, el fiscalizador critica que la sociedad estatal destine recursos financieros propios a atender compromisos que son de la Administración; que financie a entidades que no son públicas; y que no cuente con una regulación adecuada para la gestión de sus excedentes de tesorería.