Las eléctricas gastarán 20 millones de toneladas de carbón hasta 2012
Industria tiene listo el real decreto por el que pretende poner fin al colapso del carbón nacional. Las centrales eléctricas deberán gastar 20 millones de toneladas de este combustible hasta 2012, a 45 euros por MWh. El carbón se colocará en el llamado mercado de restricciones, lo que permitirá el funcionamiento del mercado diario. Las energías sobrantes serán excluidas mediante subastas.
El Ministerio de Industria ha elaborado un real decreto de alta complejidad técnica para solucionar la llamada crisis del carbón nacional provocada por la caída de la demanda y la escasa competitividad de este combustible (millones de toneladas siguen almacenadas en las instalaciones de las centrales térmicas). Se trata de un decreto, al que ha tenido acceso CincoDías, "por el que se crea el procedimiento de resolución de restricciones por garantía de suministro".
La solución es la siguiente: hasta 2012, una decena de centrales térmicas deberán quemar, con un precio regulado de 45 euros por MWh, los casi 10 millones de toneladas almacenados en estos momentos y los otros 10 millones que saldrán de las minas en el futuro. Esto supondrá consumir en tres años un 130% de la producción anual de carbón autóctono.
El texto legal, en el que han participado las eléctricas y debe pasar por la Comisión de la Energía y la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, establece que el carbón se venderá en el llamado mercado de restricciones "como garantía de suministro". Se entiende como restricción por garantía de suministro la producción que se considere necesaria de las centrales de carbón nacional, hasta el máximo fijado por la Ley Eléctrica (hasta un 15%). De esta manera, aunque se fija un precio regulado para este combustible, no se "rompe" el mercado mayorista de la electricidad (pool), pues permite la fijación de precios en el diario e intradiario. El gran temor de las eléctricas eran las pérdidas que les pueda ocasionar el lucro cesante por las tecnologías (especialmente, el gas, ya que tienen firmados contratos de take or pay) que se deben retirar para dejar hueco al carbón.
Las subastas en el pool seguirán funcionando normalmente y, una vez que se salde la demanda con la compra obligatoria de carbón en el mercado de restricciones (que dirige REE y está pensado para cubrir puntas de demanda), la energía innecesaria será excluidamediante subastas. El objeto es reducir , mediante pujas, los valores programados que resulten necesarios para ajustar la oferta y la demanda.
El sector calcula que estas medidas podrían hacer caer el precio del pool en ocho euros MWh. Pese a las cifras millonarias que han circulado, las empresas cifran en unos 200 millones de euros la diferencia de ingresos con la aplicación de la medida respecto a la situación actual. También provocará déficit de tarifa. El carbón autóctono no casaba en las subastas del pool desde hacía cinco o seis meses por la caída de los precios del gas y el derrumbe de la demanda.
Garantía de potencia
El decreto, con un anexo en el que figuran las 10 centrales afectadas (Soto de Ribera, Narcea, Anllares, la Robla, Compostilla, Teruel, Velilla, Puentenuevo, Puertollano y Escucha), hace una defensa de la producción con carbón autóctono para evitar que el parque de generación desaparezca y dada "la incertidumbre y la variabilidad" de la producción con energías limpias.
La diferencia entre el coste de generar con carbón y el precio regulado que se establecerá será compensado, vía tarifa, con los llamados pagos por capacidad. Una vieja subvención que Industria eliminó hace dos años y que ahora se dispone a recuperar. Las empresas recibían estos pagos (conocidos antiguamente como garantía de potencia), por tener las centrales disponibles y funcionar un mínimo de horas al año. La garantía desapareció y sólo se mantuvo una ayuda por inversión, lo que perjudicó a las centrales de carbón, todas ellas amortizadas, frente a las de gas. El reglamento para la ayuda por inversión está pendiente de desarrollo.
Recuperación por falta de agua
Victorino Alonso, presidente de la patronal de la minería privada, Carbunión, se felicitó ayer por el arranque de algunas centrales térmicas que consumen carbón nacional en León y Asturias, para paliar la caída de la producción hidráulica. Pero, en su opinión, esta situación deberá mantenerse para acabar con la crisis actual.