Bridgestone confirma que cerrará su planta cántabra de Puente San Miguel en 2011
La dirección de Bridgestone ha confirmado a los sindicatos de la planta cántabra de Puente San Miguel el cierre, el 1 de enero de 2011, de la línea de producción de neumáticos ligeros destinados a camionetas.
Así se lo han trasladado a los representantes de los trabajadores en una reunión celebrada esta mañana en Basauri (Vizcaya) y a la que han acudido los sindicatos Comisiones Obreras, UGT, USO y ELA-STV, de los tres centros de producción que la multinacional japonesa tiene en nuestro país.
En declaraciones a Europa Press, Luis R. Eguren, de UGT, concretó que, según les han comentado los directivos de las distintas plantas españolas de Bridgestone, a mediados del próximo año, sobre el mes de junio, "bajarán" la producción de neumáticos para camioneta, y que a partir del 1 de enero de 2011 no fabricarán "ninguna" cubierta para este tipo de automóvil. Desde esa fecha irá desapareciendo también la maquinaria destinada a esta producción.
Según les explicaron, los motivos para cerrar la línea de producción de neumático para camioneta consisten en que no se alcanza la "rentabilidad necesaria".
Eguren, que vaticinó que la negociación va a ser "larga y dura", estimó en unos 250 los trabajadores afectados por el cierre de esta planta. En cualquier caso, desde la empresa no les han dado una cifra concreta del número de empleos, por lo que pueden ser "más o menos".
Aún así, y ante una medida de esta "magnitud", los sindicatos reclaman soluciones "de la misma magnitud", para garantizar que la plantilla de Puente San Miguel -que se reparte en dos líneas de fabricación de neumáticos, para camioneta y tractor- se mantenga "intacta". En este sentido, el sindicalista destacó la "expectativa" de la dirección de "potenciar a medio plazo" la línea de tractor.
Señaló también que debido a la rapidez con que se les ha convocado para la reunión de hoy, desde la dirección de Bridgestone no les han aportado más datos.
Por último, y en relación a los ánimos de los trabajadores, el sindicalista comentó que tras el "sock inicial", que fue "muy importante" e "impactante" puesto que no se esperaban la noticia, se encuentran "más tranquilos", tras un periodo de "indignación" y "reflexión".
Con todo ello, incidió en que tienen informaciones "poco concretas", de ahí la "incertidumbre" que sienten, "como no puede ser de otra manera".