La ola de suicidios en France Télécom provoca la salida del número dos
Era el encargado de transformar el grupo La presión sobre la cúpula de France Télécom por la ola de suicidios en la compañía ha forzado la salida del número dos, Louis-Pierre Wenes, señalado por los sindicatos como uno de los responsables de presionar a los empleados para conseguir mejores resultados.
France Télécom ha remodelado su cúpula directiva y ha nombrado a un nuevo número dos para intentar calmar la tormenta política y social que ha generado la ola de suicidios entre empleados de la compañía. A la vez, la operadora estatal se ha comprometido a congelar hasta fin de año la reestructuración que se estaba llevando a cabo en la firma.
El nuevo viceconsejero delegado es Stéphane Richard, antiguo asesor de la ministra de Economía y hombre muy ligado al Gobierno de Nicolas Sarkozy. Sustituirá de manera inmediata a Louis-Pierre Wenes, quien, según la versión oficial, ha pedido al primer ejecutivo, Didier Lombard, "ser relevado de sus responsabilidades".
Política de estrés
Los medios franceses, sin embargo, recuerdan que Wenes ha sido el blanco de las críticas de los sindicatos, por haber puesto en marcha "una gestión basada en el estrés de los empleados", aseguran.
Wenes, de 60 años, llegó en 2002 a France Télécom como director de compras y de mejora del rendimiento. En 2005 comenzó a ocuparse del plan Next, para la modernización de la operadora, desde donde pasó, en 2006, a responsabilizarse de las operaciones en Francia y de la transformación del grupo. Desde febrero pasado era, además, viceconsejero delegado.
Su salida es un gesto hacia la plantilla, presionada por las continuas políticas de reducción de costes, de rotación, de despidos y de peticiones de eficiencia. Sobre todo, porque él mismo se puso en el centro de la polémica, al asegurar hace unos días que los suicidios afectaban sólo a "un grupo reducido de empleados" que no supieron adaptarse y que la situación "no es tan mala".
Según los datos de Reuters, los 24 suicidios y 13 tentativas que ha habido en France Télécom en 18 meses suponen una proporción en línea con la de la población francesa.
Está por ver, con todo, si la salida de Wenes no sabe a poco, ya que los sindicatos y la oposición pedían la salida del consejero delegado.
Un nombramiento que da un papel más activo al Gobierno
El sustituto de Wenes es Stéphane Richard, una persona muy bregada en relaciones con los sindicatos, pero también muy cercana al Gobierno. Eso ha llevado a pensar a varios analistas que el Ejecutivo quiere tomar un papel más activo en France Télécom, donde el Estado tiene un 27%.Ya había decidido hacerlo, porque Richard llegó a la operadora hace unos meses pasa suceder al primer ejecutivo, Lombard, en 2011. Con su nombramiento actual, Richard está más cerca del poder y de sustituir a Lombard si el escándalo puede con el máximo ejecutivo, pero también puede perjudicarle si la polémica arrecia.