La banca concentra las subidas de las comisiones en las tarjetas y las cuentas

Bancos y cajas prosiguen el ajuste de sus comisiones al contexto económico adverso. La crisis ha disminuido la demanda de créditos y, como agravante, el descenso de los tipos de interés ha torpedeado sus márgenes. Por eso, la banca lleva año y medio aumentando los cargos que aplica a los servicios financieros más básicos: las cuentas y las tarjetas.

De acuerdo con el portal del cliente bancario del Banco de España, en septiembre subió el coste de mantener cuentas corrientes y de ahorro hasta 21,07 y 20,43 euros, respectivamente. Estos servicios se encarecen, por tanto, un 6,3% y un 7,6% en un año. La subida experimentada por el adeudo de recibos fue aún más marcada. Los apuntes subieron un 12,9% en términos interanuales y tienen un coste medio de 35 céntimos de euro.

Los cargos por ingreso de cheques se incrementaron en términos absolutos. De media cuesta 2,62 euros cobrar un talón de una oficina situada en la misma población donde fue emitido el documento (+15,4%) y 2,94 euros si es de otra plaza (+9,3%).

De todas formas, las tarjetas son el servicio cuyo precio sube más frecuentemente. En 12 meses, bancos y cajas han corregido al alza la cuota anual de tarjetas de débito nueve veces, y en ocho ocasiones las de crédito. Disfrutar de una de débito cuesta ya 16,66 euros, un 14,3% más que en otoño de 2008. Y la comisión media por la de crédito es de 33,30 euros (+9,3%).

La disposición de dinero de un cajero de la propia red también se ha vuelto más onerosa. Bancos y cajas cobran, de media 76 céntimos si el plástico es de débito (+7%) y 2,39 euros en el caso de productos de crédito (+4,8%).