El Ejecutivo destina 400 millones para ampliar el plan Futur-E
La Secretaría de Estado de Turismo se ha guardado un as debajo de la manga. De los 776 millones del presupuesto que tiene asignado para 2010 ha reservado 400 millones para la segunda fase del Plan Futur-E.
En la primera fase, vigente hasta el 31 de diciembre de 2009, las empresas hoteleras pueden optar a través de una línea del ICO dotada con 500 millones de euros (hasta un máximo de dos millones por compañía) para renovarse mediante mejoras en el ahorro de agua, el uso de energías renovables o la implantación de sistemas de calidad. De esa partida, cien millones se han reservado para Canarias, una de las comunidades más castigadas por la menor entrada de turistas extranjeros. El Ejecutivo lo justifica por su condición de región ultraperiférica, aunque en esa decisión puede haber pesado la necesidad de asegurarse el apoyo de Coalición Canaria para los Presupuestos de 2010.
El Ejecutivo prevé que los fondos de la primera fase del Plan Futur-E se agoten en breve y que eso provoque la puesta en marcha de una segunda fase. Para ello se basa en los buenos resultados obtenidos por el plan renove de instalaciones turísticas, articulado en dos fases. La primera, dotada con 400 millones, quedó cubierta en 23 días, mientras que la segunda, de 600 millones, apenas duró seis días.