IU y ERC se abren al pacto presupuestario
El bloque parlamentario de izquierdas que se formó durante el reciente debate de las ayudas a los parados sin subsidio sigue compacto. Izquierda Unida-Iniciativa por Cataluña, Esquerra Republicana y el Bloque Nacionalista Gallego sembraron ayer sus discursos de críticas genéricas a la política económica del Gobierno, pero en todo momento dejaron clara su sintonía con las intenciones de fondo que defiende Zapatero en la justificación, por ejemplo, de su anunciada subida de impuestos.
El portavoz de ERC, Joan Ridao, fue el más contundente en sus críticas. Le dio estos consejos al presidente del Gobierno: deje de improvisar y de contradecirse, no se empecine en actuar por su cuenta, realice propuestas claras sobre política fiscal para que analicemos el calibre real de las reformas, deje de hacer el papel de Robin Hood, que roba a los ricos para dárselo a los pobres y, por último, apriete el cinturón al sector público.
Gaspar Llamazares (IU) reprochó al Gobierno que intente cambiar la política fiscal para cubrir el déficit público y apostó por una reforma profunda para "recuperar justicia ya que sólo pagan impuestos los asalariados y los consumidores". El portavoz de IU exigió a Zapatero que modifique la tributación de las sociedades de inversión de capital variable (sicav), una iniciativa a la que el presidente dejó la puerta abierta.
