Zapatero traslada a la cúpula del PSOE su negativa a subir el IVA
Habrá un drástico recorte del gasto, salvo en inversión y política social.
Poco a poco, José Luis Rodríguez Zapatero va marcando las líneas rojas de la reforma tributaria que incorporará a los Presupuestos estatales de 2010. El presidente informó ayer a la Ejecuti- va del PSOE que el Gobierno no aumentará el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) porque en un momento de crisis como el actual penalizaría el consumo y la actividad económica.
De esta forma, Zapatero da por bueno el criterio que defiende la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, heredado de su predecesor en el cargo, Pedro Solbes. El ex ministro siempre defendió, en contra del criterio de CEOE y de las Cámaras de Comercio, que un aumento del IVA casi siempre tiene efectos secundarios perniciosos, ya que si la medida se adopta en época de crisis afecta al consumo, y si se hace en la fase alta del ciclo suele disparar la inflación. El propio Solbes salió vacunado en 1994, al contemplar después los efectos contraproducentes que tuvo entonces subir un punto este tributo, hasta el 16% actual.
Zapatero le trasladó también ayer a la cúpula de su partido su intención de pactar con los grupos de la oposición unos Presupuestos estatales para 2010 que incorporarán fuertes recortes en la mayoría de los ministerios. Esta regla sólo tendrá dos excepciones: las partidas que afecten a la política social, especialmente las destinadas a pensiones, prestaciones por desempleo, ley de Dependencia y becas, y aquellas que servirán para sostener la inversión pública, procedentes, sobre todo, del Ministerio de Fomento que dirige José Blanco.
El Gobierno y la dirección del PSOE se afanarán en los próximos meses en combatir los mensajes poco esperanzadores para España emitidos por algunos organismos internacionales, entre ellos la OCDE. El índice de confianza hecho público la semana pasada por el Instituto de Crédito Oficial, basado en una muestra de 1.000 entrevistas, es utilizado en la sede federal del PSOE como una referencia evidente de que asistimos "al principio de la recuperación económica en España". Así lo relató ayer la secretaria de Organización, Leire Pajín.
Todo pasa por el pacto sindical y parlamentario
Ya sea por la debilidad parlamentaria que sufre el Gobierno, ya sea por la ausencia de referencias claras sobre la mejor manera para sortear la crisis, lo cierto es que Zapatero ha decidido vincular el grueso de sus iniciativas en política económica al consenso con sindicatos y grupos parlamentarios.El diálogo pendiente con estos últimos sobre los Presupuestos sirvió ayer de excusa al presidente para no detallar ante la Ejecutiva la reforma fiscal en ciernes.El sometimiento al principio de consenso no sólo opera para los Presupuestos. El PSOE también introdujo ayer en la lista de iniciativas pendientes de pacto el aumento de las pensiones mínimas, la coronación legislativa de la financiación autonómica, las ayudas a los parados sin subsidios y la llamada ley de Economía Sostenible.
