Tejidos que resisten a los elementos
Internacionalización, especialización e inversión constante en I+D. Esos son los principios estratégicos que han convertido a Relats en referente en la fabricación de tubos aislantes de trenza de fibra de vidrio.
La profunda crisis del textil tradicional español de finales de los años setenta obligó al sector a someterse a un difícil proceso de modernización. Para el verdadero emprendedor, que convierte las amenazas en oportunidades, el imperativo de reconversión representa la apertura de nuevos horizontes de expansión. La familia Relats siempre lo vio claro.
Relats, SA, se ha hecho un hueco en el mercado de los textiles técnicos gracias a su firme apuesta por la innovación y la especialización, seña de identidad desde su creación en 1957. "Lo llevamos en los genes, aunque el proceso fue in crescendo", explica Pere Relats, presidente de la compañía. En los últimos años, esta pyme catalana ha destinado una media del 3% de su volumen de negocio a la inversión en I+D.
Más allá del nombre, poco tiene que ver la Relats de hoy con el modesto taller que abrió Vicenç, fundador y padre del actual presidente, hace ya más de 50 años. Entonces, en la fábrica se trabajaba fundamentalmente con algodón, pero cuando el mercado exigió nuevos productos no dudaron en aventurarse con el trenzado de fibra de vidrio, campo que les era completamente desconocido. Hoy constituye su especialidad principal. Fue el primer gran salto en la historia de la compañía.
El producto estrella de Relats son los tubos flexibles de fibra de vidrio, que proporcionan aislamiento eléctrico, aunque su catálogo es amplísimo. La gama de aislantes fabricados con poliéster para la protección mecánica y térmica cuenta también con un número significativo de patentes y homologaciones. Los materiales que produce Relats son capaces de reducir el sonido, proteger de los efectos de la abrasión, el agua, el fuego, la tracción, el alto voltaje y hasta los roedores.
En este nicho de mercado, Relats tiene una presencia notable a nivel internacional. Además de la sede principal de Caldes de Montbui (Barcelona), cuenta con plantas de producción en Gales (Reino Unido) y en Zhenze, en la provincia china de Jiangsu.
Nada ha sido fruto de la casualidad. Pere, que ya desde adolescente pasaba los veranos en la fábrica, siempre ha estado al pie del cañón. Creció trabajando y trabajó siempre para crecer. "Para nosotros el mercado es el mundo", afirma convencido. La actividad exportadora comenzó en el año 1976 y actualmente más del 90% de la producción va a parar al exterior.
La primera fase de internacionalización, que supuso el segundo gran salto en la historia de la empresa, ocurrió en los ochenta. Los hombres de confianza de Vicenç, generación de autodidactas, dejaron paso a un grupo de jóvenes licenciados que apenas superaba la veintena. El relevo, en términos laborales, abarcó casi dos generaciones. "Fue un salto grande, pero no traumático," cuenta Pere, que accedió al cargo de consejero delegado en 1980. En aquel momento, se pusieron como objetivo la conquista de Europa y Norteamérica. La inauguración de la planta de China en 2004 fue el último hito en una dilatada trayectoria de expansión.
Relats tiene clientes en casi todos los continentes. Más del 60% de su cifra de ventas proviene del sector automovilístico, aunque es una prioridad estratégica reducir este porcentaje a costa del crecimiento en otras áreas. La mayor parte de la inversión en I+D se destina actualmente al desarrollo de tejidos protectores para el sector aeronáutico. Para este proyecto cuentan con la financiación del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), con el que tienen un largo historial de colaboración. El reto es importante, pero, según su presidente, ése es el terreno en el que están acostumbrados a jugar.
Ahora, en Relats creen que la crisis les permitirá ganar terreno a nivel global, ya que sus competidores han salido debilitados. El presidente encuentra lecturas positivas incluso en la delicada situación de la industria del automóvil, a pesar de la exposición de Relats al sector.
Pere ya piensa en colocarse de cara a la recuperación. De más joven, salía en coche durante días a buscar clientes. Ahora va en avión. Confiesa que dedica atenciones especiales al gigante asiático. Ávido todavía de nuevos mercados, trabaja en la construcción de una red de distribución por toda Asia. "Ellos liderarán el crecimiento mundial", asegura con rotundidad. Y si el futuro está en Asia, Relats no puede faltar.
Diversificación por tierra, mar y aire
Además del volumen de inversión en I+D, que ascendió a 2,35 millones de euros en los últimos cinco años, hay más indicadores que ponen de manifiesto la importancia de la innovación para Relats. Uno es la generación de patentes. La empresa catalana cuenta con 39 patentes concedidas y más de 30 en curso. El otro indicador es el nivel de facturación de productos nuevos: el 37% de las ventas proceden de productos que tienen menos de cuatro años.La investigación aporta valor a todos los segmentos del proceso productivo de Relats. Un 8% del total del personal se dedica a este tipo de proyectos, que van desde el diseño de hornos de acabado para mejorar el barnizado de los tubos hasta la creación de productos que permitirán a la empresa abrirse camino en nuevos sectores.La diversificación se hace más necesaria que nunca en los tiempos que corren, y Relats apunta alto. En el sector aeronáutico, en el que los componentes de base textil están ganando peso, el objetivo inmediato es el gigante europeo Airbus, además de diversos fabricantes europeos de helicópteros.Actualmente, la fabricación de componentes para el sector del automóvil representa más de la mitad del negocio de la compañía catalana, aunque el presidente, Pere Relats (en la foto sobre estas líneas), espera reducir hasta un 40% el peso de la automoción en su actividad en los próximos años.Otros mercados en los que Relats aspira a crecer a medio plazo son el ferroviario, en el que ya tiene clientes de referencia mundial y una amplia red de distribución, y el de las energías renovables. Según Relats, este último campo es uno de los que tienen mayor potencial de futuro, especialmente cuando se supere la actual crisis y se reactive la inversión. La compañía planea situarse como referente en la fabricación de aislantes especiales para plantas de energía eólica instaladas en alta mar.
Datos básicos
Facturación. El año pasado, la cifra total de ventas de la compañía superó los 22 millones de euros. La mayor parte de la producción corresponde a la planta de Caldes de Montbui, que cuenta con una nave de 7.200 metros cuadrados en tres plantas. La fábrica china, por su parte, duplicó su facturación entre 2007 y 2008, y ya supera los números de la planta en el Reino Unido. Las instalaciones de Zhenze ocupan ahora una superficie de 6.000 metros cuadrados, pero ya se piensa en una posible ampliación debido al gran potencial del mercado asiático.Clientes. Por zonas geográficas, Europa está a la cabeza de la lista de clientes de Relats. Un 78% de las ventas de 2008 se produjo en el mercado europeo, donde la facturación ascendió a 14 millones de euros. Eso incluye el 6,5% del volumen de negocio generado en España, y el 22% de los Países Bálticos, zona que reportó unas ventas de más de 4 millones de euros. Esta región, con un crecimiento respecto al año anterior del 4% de las ventas, se ha revelado como uno de los principales mercados para Relats. La demanda también creció en África, con el Magreb a la cabeza. Allí se produjo el 12% de las ventas, por valor de 2,1 millones de euros. Asia representa en estos momentos el 8% del mercado de Relats, aportando 1,5 millones de la facturación.