El consumo mundial de petróleo cayó en 2008 a niveles de 1982, según BP
El consumo global de petróleo se redujo el 0,6% en 2008 hasta los 420.000 barriles diarios, lo que refleja el mayor descenso desde 1982, según el "Statistical Review of World Energy 2009" que elabora la petrolera británica BP y que se ha difundido hoy.
En los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el consumo de crudo registró el pasado año su tercera caída anual consecutiva a consecuencia de los elevados precios del crudo, mientras que en los países de fuera de la OCDE, aunque el consumo mantuvo su solidez, la producción registró el mayor descenso desde 1992.
Según explicó hoy el economista Christof Rühl, la demanda energética de la OCDE es más sensible al incremento de los precios mientras que fuera de la OCDE lo es al crecimiento económico.
Así, por primera vez en la historia, el consumo energético fuera de la OCDE fue superior al de los países miembros.
El principal responsable de la caída de la demanda de petróleo de la OCDE fue Estados Unidos (EE.UU), cuyo consumo se redujo en 1,3 millones de barriles diarios, el 6,4%, lo que supone la mayor caída desde 1980.
Por su parte, otro de los factores que ha repercutido en el consumo de crudo fue la caída de las importaciones por parte de los países no miembros de la OCDE.
En este sentido, Asia redujo a la mitad las importaciones y pasó a los 340.000 barriles al día, mientras que China pasó de los 360.000 barriles diarios de 2007 a 260.000 en 2008.
Los principales productores de petróleo fueron Arabia Saudí, Irak, Qatar y Kuwait, todos ellos miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), entidad que ostenta el 76 por ciento de las reservas de petróleo, seguida de los países de la antigua Unión Soviética, que controlan el 10 por ciento.
Según subraya el informe, a finales de 2008 se debilitaron los márgenes de refino, coincidiendo con la caída de la demanda de petróleo a consecuencia de la actual coyuntura económica.
Así, se recortaron las partidas de crudo en todas las regiones, lo cual contribuyó "momentáneamente" a contener las existencias mundiales, aunque retrasó la reducción de las existencias mundiales de crudo que había previsto la OPEP.
Por su parte, las emisiones de co2 a la atmósfera aumentaron el pasado año el 1,6%, gracias fundamentalmente a las emisiones de China, una cifra que sin embargo está por debajo de la media de los diez años anteriores al 2002.