No obstante, la economía rusa, que se ha visto seriamente dañada por el desplome de los precios del crudo desde el verano de 2008, experimentó un crecimiento del 7,5% entre abril y junio respecto a los tres primeros meses del año.
Rusia registró en 2008 su menor tasa de crecimiento desde 2002, al expandirse un 5,6%, frente al crecimiento del 8,1% de 2007. Asimismo, las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) apuntan a una contracción del 6,5% este año y un crecimiento del 1,5% en 2010.