La caída de la actividad mitiga las muertes en accidente laboral
Un total de 400 trabajadores fallecieron en accidente laboral en los seis primeros meses del año, lo que supone 142 menos que en idéntico periodo de 2008 o una caída del 26,2%. Además de la aplicación de los controles pertinentes, la menor actividad explica en buena medida el descenso de la siniestralidad laboral.
Las cifras publicadas ayer por el Boletín de Estadísticas Laborales (BEL) que elabora el Ministerio de Trabajo e Inmigración constatan también una significativa disminución del número de siniestros, que hasta junio alcanzó los 338.944 accidentes con baja, lo que supone un descenso del 30,6%.
De ese volumen de accidentes, 301.029 se produjeron en el lugar de trabajo y 37.915 se registraron durante los desplazamientos que realizan los empleados, más conocidos como siniestros in itínere. Los primeros descendieron un 31,8%, mientras que los segundos cayeron también un considerable 19,7%.
Además, la estadística revela como 338.944 trabajadores necesitaron baja a consecuencia de un accidente laboral, lo cual significa una disminución del 30,6%, mientras que 347.949 no la necesitaron, lo que supone un descenso del 8,7% frente al mismo periodo del año anterior. Así, de las 400 víctimas mortales que se registraron en los seis primeros meses del año, 296 trabajadores murieron en su puesto de trabajo, un 29% menos que en igual periodo del año pasado, mientras que en accidentes in itínere fallecieron 104, lo que representa 21 muertes menos que en el primer semestre de 2008. En la clasificación de cuáles fueron las causas más frecuentes de fallecimiento, lideran, con 116 muertes, el infarto de miocardio, los derrames cerebrales y otras patologías no traumáticas; le siguen, con 47 víctimas, los accidentes de tráfico. Por otro lado, 41 personas perecieron aplastadas; 34 lo hicieron al chocar contra un objeto inmóvil; 33 al colisionar contra otro en movimiento y 25 por otras causas.
En cuanto a las enfermedades profesionales, en el periodo enero-junio se registraron 9.189 casos, de los que 5.417 causaron baja en el puesto de trabajo, una cifra que representa un descenso del 23,8% respecto al año anterior.
Los sindicatos se mostraron satisfechos por los descensos registrados, pero advirtieron que todavía son muchas las empresas que siguen manteniendo en sus centros de trabajo condiciones de fuerte precariedad aprovechando la coyuntura económica. CC OO advirtió en un comunicado que "difícilmente pueden tomarse medidas eficaces para evitar los accidentes, si los empresarios no investigan a fondo las causas que lo provocan".
Por su parte, UGT resaltó que, a la vista de los datos, tenemos identificados claramente los culpables de la siniestralidad: la temporalidad, la precariedad, la subcontratación, la falta de formación, la escasa experiencia laboral y en gran medida, la ausencia de prevención de riesgos laborales, en especial en las pequeñas compañías y en las microempresas.
La solución, según UGT, pasa por un gran compromiso de todos, Gobierno, sindicatos y patronal, que lleve la prevención de riesgos a todas y cada una de las empresas, a todos y cada uno de los trabajadores españoles.
Cataluña lidera el ranking
Cataluña encabeza la lista de mayor siniestralidad y mayor mortalidad con 57.980 accidentes con baja en jornada laboral y 47 fallecidos. Le sigue Andalucía con 53.640 accidentes y 34 muertos; Madrid con 48.643 siniestros y 35 fallecidos y la Comunidad Valenciana con 27.777 accidentes y 41 fallecidos. El sector servicios registró 133 accidentes mortales, seguido de la construcción, con 81, la industria, con 52, y el sector agrario, con 30. CC OO considera "altamente preocupantes" las cifras de siniestralidad en Cataluña. Ante esta situación, exige a los empresarios que asuman sus obligaciones en defensa de la salud de la plantilla, a la vez que reclama a la Generalitat que no alargue la puesta en marcha de las medidas contempladas en el segundo plan del Gobierno de la Generalitat sobre seguridad y salud en el trabajo.