La Bolsa se agarra a los máximos
Los mensajes positivos de los líderes económicos y políticos mundiales han tenido eco en el comportamiento de las Bolsas de todo el mundo, con nuevos avances esta semana. No obstante, y dado que los más cualificados retrasan la recuperación en EE UU para los últimos meses del año y para la segunda mitad de 2010 en Europa, es lógico pensar que han sido los razonablemente buenos resultados de las empresas cotizadas los que han impulsado los precios de las acciones por cuarta semana consecutiva, hasta un nuevo máximo anual, como en el caso de España o EE UU.
Parece evidente que se ha producido ya un cambio de tendencia en la economía, y que la depresión está descartada, lo que supone que en los próximos meses los indicadores recuperarán la compostura lentamente. Pero el exceso de optimismo, cuando no está justificado con realismo, es muy peligroso. Esta misma semana el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, ha vuelto a advertir de que el sistema financiero no está aún suficientemente recapitalizado como para hacer bien su trabajo, que no es otro que dar crédito al sector privado. Por tanto, a nivel europeo y a nivel español quedan aristas que limar para que los inversores puedan volver a los mercados financieros con garantías de tener retornos seguros.