El Barça busca el oro americano
Como si de un antiguo western se tratara, el Barça vuelve a mirar al oeste; en busca de oro. La gira por Estados Unidos que comenzó el domingo pasado es una nueva oportunidad para hacer caja y darse a conocer en Norteamérica. El paso por los estadios americanos puede engordar las arcas del Club con unas cifras que se mueven entre los 6 y los 9 millones de euros.
José María Gay Liébana, profesor de EAE Business School, y autor de informes sobre la contabilidad de los equipos de las grandes ligas de fútbol como la española, cree que el objetivo que mueve al Barça para enrolarse en este tipo de giras es asegurarse que va a entrar un ingreso mínimo de 5 o 6 millones de euros.
Para el experto, además del dinero que se puede recaudar, lo que más le interesa a un equipo como el Barcelona es fortalecer su imagen en Estados Unidos. "No cabe duda que el futuro crecimiento del fútbol pasa por EE UU. El mercado norteamericano será toda una referencia para los grandes clubes de fútbol europeos que quieren ser globales", asegura Gay Liébana.
¿Pero por qué es tan importante ese mercado? Según el analista, los clubes van detrás de los millonarios contratos con la venta de derechos de televisión, la captación de seguidores con elevado poder adquisitivo y la apertura a un mercado que está en ciernes y que no se ha desarrollado tanto como otros deportes como el baloncesto o el beisbol.
Jack Bell, columnista de fútbol del New York Times , apunta que en el pasado los grandes equipos europeos han llegado a cobrar hasta 3 millones de euros por jugar un partido. "La Mayor League Soccer (MLS), [la competición de fútbol en EE UU], puede decir que sus clubes compiten con los mejores del mundo en Estados Unidos. Esto ayuda a que los aficionados demuestren que hay miles de personas fanáticas por este deporte en el país", señala Bell. En el primer encuentro disputado el pasado día 2 entre el equipo catalán y Los Ángeles Galaxy, con victoria azulgrana por 2-1, se congregaron 93.137 espectadores en el mítico estadio Rose Bowl. Desde la final del Mundial de fútbol de 1994 no se reunía tanta gente para ver un partido de fútbol. Se espera otro lleno para el encuentro de esta noche que se diputará en Seattle ante los Seattle Sounders. La gira acabará el día 8 ante el equipo mejicano del CD Guadalajara.
Tal es la 'barçamanía' en Estados Unidos que, según la Soccer United Marketing (SUM), el brazo comercial de la MLS y organizadora del evento, a día 30 de julio ya se habían vendido 175.000 entradas, a un precio que oscila entre los 50 dólares (35,6 euros) de la más barata a los 125 dólares (88,5 euros) de la más cara. La recaudación, según la MLS, es para cubrir gastos.
Buscando lazos comerciales
En la gira, tanto los directivos como los jugadores asistirán a eventos comerciales con uno de sus más importantes patrocinadores, la marca Nike. El club informó la semana pasada en la presentación de resultados de la temporada 2008/09 que el contrato con la marca deportiva dará al Barça unos 150 millones de euros en cinco años. Además, algunos medios catalanes indican que durante su visita a Seattle está prevista una reunión entre dirigentes del equipo y Microsoft para acordar acciones conjuntas de patrocinio que le reportarían al Barça unos dos millones de euros al año.
Otros ingresos del club pasan por los contratos de televisión, marketing o venta de entradas. En este orden, el Barça ingresó casi 50 millones por la explotación televisiva, 46,5 millones en acciones de marketing y unos 40 millones con la venta de entradas o la cesión del campo para eventos como el reciente concierto de U2 en la capital catalana.
El Barça es conocedor de su tirón en EE UU y ésta no será la primera vez que visite el país. En 2006 y 2008 hizo otras giras y durante gran parte del año pasado se interesó en comprar un equipo de la Liga estadounidense para abrir al mercado anglosajón la marca Barça. Finalmente lo desestimó, aunque su contrato de colaboración con la SUM, empresa que gestiona sus derechos en el país, es un paso importante para hacerse un hueco en el mercado norteamericano. Según explica Bell, el Barça contaría incluso con una oficina propia en el edificio de la SUM.
Desde la organización dicen estar muy contentos con esta vinculación y creen que el aficionado norteamericano conoce y quiere ver jugar al Barça. "Como podemos ver con la respuesta de la afición, que ha sido antes de que el club anunciara con qué jugadores viajaría, la marca del Barça en Estados Unidos es muy fuerte", señalan desde la MLS. Bell, sin embargo, señala que "tiene la certeza" que en los contratos firmados, el Barcelona se compromete a poner a jugar a sus estrellas una buena parte del partido.
Quizá, culpa de este reconocimiento la tenga Kobe Bryant. El jugador de Los Ángeles Lakers, que vivió durante su infancia en Roma, se ha mostrado siempre como un embajador del fútbol o el soccer en su país. El para muchos mejor jugador de baloncesto del momento se vistió con una camiseta del Barça para un reportaje de la revista de la cadena de televisión Espn el año pasado.