HSBC ganó un 56,6% menos hasta junio al realizar provisiones por 19.833 millones de euros
HSBC, el mayor banco de Europa por capitalización bursátil, anunció hoy que en el primer semestre del año obtuvo un beneficio neto atribuido de 3.347 millones de dólares (2.350,9 millones de euros), el 56,6 por ciento menos que en el mismo periodo de 2008.
La entidad británica precisó que en los primeros seis meses hizo unas provisiones de 13.931 millones de dólares (9.785 millones de euros) por riesgos crediticios y deudas morosas o incobrables, un 35,9 por ciento más que en el pasado ejercicio.
Asimismo, el beneficio bruto del grupo se cifró en 5.019 millones de dólares (3.525,3 millones de euros), un 51 por ciento menos que en el primer semestre de 2008, según las cuentas remitidas a la Bolsa de Valores de Londres.
Los ingresos operativos netos (sin tener en cuenta las provisiones) fueron de 34.741 millones de dólares (24.402 millones de euros), un 12 por ciento menos que en igual periodo del año anterior.
Mejor de lo esperado
Pese a la caída del beneficio, HSBC consiguió unos resultados mejores de lo esperado en una clima económico que consideró "sin precedentes".
En un comunicado, el presidente del banco, Stephen Green, afirmó que "puede que hayamos pasado o estemos apunto de pasar el fondo del ciclo (de la crisis) en los mercados financieros".
"Sin embargo, el tiempos, la forma y la magnitud de la recuperación en una economía más amplia continúa siendo muy incierta", advirtió Green.
Por zonas geográficas, la entidad vio caer sus ganancias en todos sus mercados, especialmente en Norteamérica, donde su beneficio bruto se situó en 3.703 millones de dólares (2.600 millones de euros), casi un 30 por ciento menos que en 2008.
De hecho, HSBC se haya inmerso en un proceso de cierre de casi todas sus operaciones minoristas en Estados Unidos, país en el que ha sufrido grandes pérdidas por el impago de hipotecas durante la crisis crediticia.
En opinión del director de la sección de economía de la cadena pública BBC, Robert Peston, los resultados de HSBC demuestran la "resistencia" del grupo ante las "extraordinarias pérdidas" encajadas en el sector de los préstamos.
A diferencia de algunos de sus rivales, la entidad se negó a recibir fondos del Estado británico para ayudar a la banca a capear la crisis.
Para afrontar esa situación, HSBC optó por una ampliación de capital mediante la emisión de nuevas acciones lanzada el pasado abril, que ha recaudado 17.800 millones de dólares (12.502 millones de euros).